Previa de la agencia libre: Oakland Raiders
Los Raiders deberían ser el principal protagonista de la liga en el periodo de fichajes, ya que amasan una gran cantidad de dinero para poder fichar.
La premisa universal (o una de ellas) que gira alrededor de la NFL dice que una franquicia se construye a través del draft. Un claro ejemplo es Ted Thompson, GM de los Green Bay Packers, máximo exponente a la hora de representar esta filosofía, totalmente válida y cierta pero no exenta de matices. Si bien es cierto que el draft es el pilar básico de una reconstrucción, la agencia libre es el complemento perfecto para la fundación de un roster ganador. Los Denver Broncos, actuales campeones, nos han enseñado que también se puede construir un equipo campeón con la agencia libre como foco principal. Peyton Manning, Emmanuel Sanders, Owen Daniels, Evan Mathis, Demarcus Ware, Aqib Talib y TJ Ward son solo alguna de las piezas clave de estos Broncos que llegaron al equipo en forma de fichaje.
Uno de los equipos más "sexy" en esta agencia libre son los Oakland Raiders. Un año más, amasan una gran cantidad de dinero para poder fichar, renovar y disponer del espacio salarial pertinente para las elecciones del draft. El año pasado, pese a ser el equipo con más dinero disponible para gastar, tuvieron una agencia libre bastante discreta. Ndamukong Suh, Demarco Murray, Julius Thomas o Jeremy Maclin, entre otros agentes libres de renombre, optaron por firmar con otros equipos. Esta temporada, Oakland puede ser un destino más atractivo que en años anteriores debido a la mejora obtenida en los últimos meses, lo cual ayudaría a atraer y reclutar talento a la bahía. Otra piedra en el camino con la que se encuentran las franquicias deportivas situadas en California es el alto nivel de impuestos a pagar, que asciende al 13%, mientras que en otros estados (Washington o Florida, por ejemplo) están libres de impuestos.
El primer paso previo al pistoletazo de salida es la toma de decisiones en lo que a renovaciones se refiere. En este bloque, los Raiders tienen un trabajo relativamente sencillo, pues solo tienen tres jugadores de verdadera identidad que renovar, y ninguno de ellos corre peligro de fuga si de verdad la franquicia está interesada en su continuidad. Ellos son:
- Donald Penn: Pese a que va a cumplir 33 años en unos meses, ha sido uno de los mejores tackles de la liga durante las dos últimas temporadas. Sólo lleva dos años en Oakland y ya es uno de los líderes en el vestuario, siendo uno de los principales apoyos de Carr. Sin florituras, hace siempre su trabajo y la durabilidad es uno de sus puntos fuertes. Probablemente los Raiders le recompensen con un contrato bastante generoso de tres años de duración.
- Aldon Smith: Los Raiders sorprendieron con su contratación, pero hasta ahora el ex de los 49ers no ha dado problemas y aunque su rendimiento no ha sido el que fue en sus primeros años como profesional, Aldon Smith es un jugador de un talento de élite y que puede marcar diferencias en cualquier momento. Es complicado saber que harán con él, pero la renovación sería un paso lógico para ambas partes.
- Marquette King: En 2009, los Raiders ya hicieron a su punter el mejor pagado de la liga. Siete años más tarde, King tiene todas las papeletas para hacer lo propio gracias a su pierna y sobre todo a la flexibilidad salarial de la que dispone su equipo.
Una vez comience el mercado de fichajes, los Raiders están ante una posibilidad de la que no se habla mucho, pero que existe: podrían ganar la AFC West la próxima temporada si son ambiciosos en sus contrataciones. Denver es candidato a tener un año post-Super Bowl un tanto duro, los Chiefs no ofrecen una sólida garantía de alternancia y los Chargers parece que atravesarán una difícil odisea. En 2015 vimos una clara mejoría en el estado de salud de la franquicia, y 2016, consolidado con nuevas caras, puede ser el año en que los Raiders, después de 14 años, vuelvan a los Play Offs.
Alguna de esas caras, en forma de fichajes, podrían ser las siguiente (cinco):
- Nick Fairley (DT): Tal vez Malik Jackson de Denver sea el "hot name" en la posición, pero creo que Fairley es un jugador mucho más talentoso y dominante si está centrado. Después de la oportunidad que se le brindó a Aldon Smith, se podría hacer lo propio con Fairley, un jugador que necesita de estar motivado para rendir al 100%. Con flexibilidad salarial y un talento como el del ex-jugador de Auburn, sería una apuesta con mucho sentido y con una alta probabilidad de ser recompensada.
- Casey Hayward (CB): Pese a que nunca consiguió mantener el nivel de su año rookie, el aún Packer es uno de los mejores jóvenes cover corners de la liga. Tiene serias deficiencias a la hora de placar, pero se puede convivir con ellas. Un jugador que podría sustituir desde el primer momento al ya casi proyecto fallido DJ Hayden.
- Eric Weddle (Safety): Quiere jugar en un equipo contendiente a la Super Bowl pero tal vez quedarse en California, en la AFC West y aterrizar en un proyecto de futuro le hagan cambiar de parecer. Los Raiders además le pueden ofrecer prácticamente más dinero que cualquier otra franquicia. Debería ser uno de los grandes objetivos de Oakland para sustituir al retirado Charles Woodson.
- Doug Martin (RB): La carrera de Martin es un tanto extraña y se mueve en picos de rendimiento muy variados que no invitan al optimismo ni a la garantía, pero cuando está ON es un corredor dominante. "Muscle Hamster" es además nativo de Oakland. Murray es un gran atleta, pero no puede ser el feature back de un equipo NFL.
- Alshon Jeffery (WR): ¿Por qué no?. Se drafteó a Cooper y se renovó a Crabtree, pero hay dinero de sobra y pese a no ser una necesidad imperiosa, un fichaje como este daría aún más confianza y peligro a Derek Carr. Los Arizona Cardinals con su innumerable cuerpo de receptores puede ser un buen ejemplo de como un buen receptor siempre tiene sitio.
No hay ninguna excusa para que los Raiders no sean tremendamente ambiciosos en el período de fichajes. Ni siquiera la falta de dinero puede suponer una excusa: Cortes, reestructuraciones y propias estructuraciones contractuales a la hora de fichar jugadores (el salary cap puede ser mínimo en el primer año y empezar a computar una cifra realmente elevada al siguiente) sirven como excusa para no ser ambicioso. Los Chiefs ficharon a Jeremy Maclin el año pasado con un salary cap negativo y los Saints llegaron a hacer lo propio con Jairus Byrd. Los Raiders no pueden repetir una agencia libre como la del año pasado. Con las mejoras vistas en el campo el último año, el Front Office debe empezar a pensar en los Play Offs.