Clete Blakeman es el referee elegido para la Super Bowl 50

Cuando la temporada NFL está a punto de acabarse es cuando los árbitros más se la juegan, la Super Bowl marca de alguna manera la terminación de la temporada como si de una nota de cata se tratase, este es el partido que más se analiza en todos los sentidos y deja el regusto del arbitraje de toda la temporada, que no empezó nada bien y se ha corregido bastante en playoffs.

La NFL es fiel a sus tradiciones y un referee asignado en ronda divisional se enfrentará al escrutinio de más de 100 millones de personas en directo en la Gran Final. Reconozco que me he equivocado, creía que Dean Blandino y Alberto Riveron, Vicepresidente y Director de arbitraje NFL, iban a apostar a caballo ganador, que no se la iban a jugar lo más mínimo y el nombre de Tony Corrente se inscribiría de nuevo en las enciclopedias deportivas, pero no… se han inclinado por dar una oportunidad a alguien que todavía no ha dirigido una Super Bowl; Clete Blakeman, el referee del volado… de la moneda… que no giró antes del extra time, segundos después de que Aaron Rodgers se coronase como Rey de los “Hail Mary” , y de quarterback estrella a quarterback, porque Blakeman además de ser abogado y llevar seis años de referee en la NFL, ha sido quarterback de la Universidad de Nebraska. A su lado tendrá su “umpire” Jeff Rice, y un equipo con casi 100 años de experiencia combinada en la NFL, no digamos ya en el football… como veis lo de habérsela jugado se relativiza poco a poco cuando se empieza a ahondar en los datos. Mi próximo artículo, anterior a la Super Bowl, hablará de ellos, para que les conozcáis un poco antes de verlos en acción en la noche más importante del año en lo que a fútbol americano se refiere.

Pensaréis que el hacer un artículo sobre el equipo arbitral de la Super Bowl en la sección NFL del diario AS, es lo más normal del mundo… pues la revista de referencia del arbitraje “referee magazine” publicaba que los medios americanos se hacían eco de que Bill Belichick había informado a sus jugadores de New England de las tendencias arbitrales de los equipos arbitrales antes de los partidos como si fuera algo extraordinario… creo que como no han podido encontrar algo a los Patriots este año, el deflategate dio mucho juego todo hay que decirlo, estábamos fuera de temporada como locos hablando de balones, su forma, medidas, peso como si nos fuera la vida en ello… algo había que decir, pues bien en un deporte en el que hay personas encargadas de analizar la altura del césped, las corrientes de aire en cada Estadio o los decibelios del público entre otras muchas cosas, es bajo mi punto de vista esencial que los jugadores conozcan quién les va a arbitrar y de qué manera hasta el mínimo detalle, que a este nivel todo cuenta para ganar o perder un partido, la noticia no es que Bill Belichick u otro entrenador principal informe a sus jugadores hasta donde pueden estirar el Reglamento a su favor, lo extremadamente raro es que no se hiciera.

Para las finales de Conferencia del pasado fin de semana si se había apostado a caballo ganador desde las oficinas de Nueva York. En el encuentro entre los Cardinals y los Panthers el referee asignado era Bill Vinovich, que hizo un gran trabajo en la última Super Bowl, y obviamente pasó desapercibido en este encuentro por la diferencia de puntos que Carolina le endosó a Arizona, mirando los números se pitaron solo 13 faltas en todo el partido, partido que se les hizo muy largo a los aficionados de los Cardinals y quizás muy aburrido al aficionado neutral.

Ed Hochuli, el referee profesor, se ocupaba del encuentro estrella entre los Patriots y los Broncos. El veterano referee era fiel a su estilo, explicaciones largas de la jugadas y mucha comunicación en el terreno … va a ser una pena que lo vayamos a ver cada vez menos, porque existe la tendencia de “robotizar” a los referees en el terreno, a lo mejor para ir preparando nuestras mentes a la cada vez mayor mecanización del arbitraje. A pesar de ser un partido muy disputado hasta el final, se señalizaron 15 faltas, por lo que los pañuelos no volaron en exceso.

La nueva regla introducida este año de retrasar la distancia en los intentos de extra point ha podido de alguna manera condicionar que los Patriots no hayan llegado a la Super Bowl. Gostkowski falló su primer intento de conversión en el partido y Belichik se la jugó al final del partido sin contar con él … nadie a ciencia cierta sabrá, excepto el equipo técnico de New England por supuesto, si una cosa guarda relación con la otra, pero el dato ya es historia de la Liga.

Os traigo una jugada que ha sido polémica en este partido, el pase de Peyton Manning a su running back Ronnie Hillman al final del primer cuarto en segundo down y 8, en el terreno se señaló pase incompleto, fallo achacable al line judge Carl Johnson (árbitro a tiempo completo de la Liga y antigüo Vicepresidente de arbitraje NFL), que debería haberlo visto sobre el terreno y no hacer llegar la jugada a la cabina de videoarbitraje.

Como no podía ser de otra manera New England solicitó challenge, que terminó dándoles el balón cambiando la decisión a backward pass, pase hacia atrás (ojo tanto pases retrasados como laterales entran en esta denominación). Ed Hochuli explica muy bien la decisión siendo fiel a su estilo; se determina el pase atrasado tirando una línea imaginaria desde el punto de inicio del pase hacia el punto donde el balón es tocado por un jugador o se estrella contra el suelo, si esa línea es paralela o se dirige hacia la línea de marca del ataque es pase hacia atrás. El balón en esta jugada se considera suelto, y la consecuencia de ello es que los Patriots pueden recuperar el balón, como hicieron, lo que cambió la posesión.

Por cierto y siguiendo con el tema de las nuevas reglas de conversión después del touchdown, al final del partido cuando Denver intercepta el balón en el intento de conversión de dos puntos de New England, podían haber llevado el balón hasta línea de anotación contraria para conseguir a su vez dos puntos …