Los San Francisco 49ers escogen a Chip Kelly como entrenador
La franquicia apuesta por recuperar a quien dirigiera con maestría a la universidad de Oregon y espera esquivar al terrible general manager de Philly.
Los San Francisco 49ers han elegido entrenador y, a buen seguro, no dejará a nadie indiferente. Nada menos que Chip Kelly, una de las figuras más controvertidas del actual panorama de la NFL, será el encargado de intentar devolver a la franquicia a la élite. Palabra clave: intentar.
Tras el despido de Jim Tomsula, el general manager del equipo, Trent Baalke, y el dueño, Jed York, afrontaron este proceso de fichaje de nuevo entrenador con la idea clara de meter un nombre potente en la banda. Nada de perfil bajo, en este caso, como fue Tomsula, nada de sensación de interinidad. Un proyecto grande comienza con un grande como entrenador como idea principal.
Con esa dirección estratégica han aparecido los siguientes nombres, ya fuera en rumores o entrevistas: Sean Payton, Mike Holgrem, Mike Shanahan, Tom Coughlin, Hue Jackson y el propio Chip Kelly. Casi nada.
Su principal candidato fue Sean Payton. Las peticiones de los Saints eran, al menos, una segunda ronda del draft para dejar escapar a su gran líder, y las del tipo no bajaron de 10 millones de dólares al año por cinco años. Las negociaciones murieron ahí. Luego se lanzaron a por Hue Jackson y estuvieron cinco horas de intensa charla con él. Nada concretaron y Jackson aceptó la primera gran oferta que le llegó: la de los Browns. Los otros grandes nombres más parecieron un señuelo que una realidad.
Al final han apostado por Chip Kelly. A buen seguro que su idea es encontrar al entrenador de Oregon. A aquel que revolucionó la NCAA, que dominó la conferencia del Pacífico (la Pac-12), que enamoró a toda una generación de muchachos que querían jugar para él, para su estilo insultantemente ofensivo, agresivo, anotador, vibrante, bello, descomunal. Pero seguro que quieren evitar, a toda costa, al entrenador que se convirtió en general manager en Philadelphia y destrozó una plantilla en poco más de una temporada, despojándola de sus estrellas, sobrepagando a tantas otras y dejando a la franquicia en los huesos vaya usted a saber por cuánto tiempo.
Ese problema no lo tendrán en San Francisco porque Kelly, un tipo muy inteligente que habrá aprendido de sus errores, no quiere tener el poder de decidir quién está en la plantilla y sólo entrenará, siendo Baalke el que se siga encargando de fichajes, draft y quien tenga la última palabra en los 53 hombres que se jueguen las castañas en la temporada.
La gran primera duda que aparece en el horizonte, de las cientos que se me ocurren, es lo que esto significa para Colin Kaepernick. El QB parece haber roto todos los puentes con la franquicia, así como con sus compañeros, pero es obvio que el sistema ideal de Kelly encaja como un guante en el estilo de juego de Kaep.
Sea lo que sea que decida, tendrá mil lecturas diferentes y opiniones encendidas. Haga lo que haga tendrá la misma repercusión exagerada. La fascinación por Chip Kelly cambia de costa y se va al Oeste, donde se pasó años siendo una leyenda. Ahora, que empiece, desde ya, el cruce de opiniones extremas: el Chip way of life llega a San Francisco.