Raiders quizá dicen ‘adiós’ a Oakland entre sonrisas
En la despedida de Charles Woodson como jugador en Oakland, los de negro y plata logran sacar una emotiva victoria ante la posibilidad de mudarse a L.A.
Si fue su último juego en Oakland, los Raiders lograron despedirse de sus aficionados con una victoria en un juego que tuvo tintes de frustración, como las muchas acumuladas en el O.co Coliseum los últimos años.
En un duelo emotivo por la posible mudanza de los de negro y plata a Los Ángeles, los Raiders vencieron a los Cargadores 23-20 con un gol de campo de 31 yardas de Sebastian Janikowski en tiempo extra en la que sí fue oficialmente la despedida de Charles Woodson, futuro miembro del Salón de la Fama y leyenda viviente de los Raiders que anunció que se retirará al final de la actual temporada regular.
Tras el triunfo, que llegó con jaloneos y no por un excelso juego de los Raiders, Woodson dio un emotivo mensaje en el que le pidió a los aficionados una última porra con el grito de “¡Raiders, Raiders!” y en el que les aseguró que su corazón se quedaría en Oakland.
Por unos momentos en el primer cuarto, Cargadores y Raiders parecieron dispuestos a enfrascarse en un duelo de toma y daca, pero la amenaza quedó sólo en eso.
Tras interceptar a Derek Carr en la cuarta jugada del partido, los Cargadores se fueron arriba 7-0 con una carrera de anotación de una yarda de Donald Brown.
Los Raiders respondieron rápidamente al montar un ataque que avanzó 77 yardas en nueve jugadas que Latavius Murray culminó con un acarreo de 22 yardas a las diagonales.
El empuje ofensivo le alcanzó para lograr más a San Diego, que se fue arriba 14-7 en el segundo cuarto con un pase de touchdown de siete yardas de Philip Rivers a Dontrelle Inman, al que Oakland sólo pudo responder con un gol de campo de 50 yardas de Janikowski.
Los Cargadores se fueron arriba al medio tiempo 17-10 con un gol de campo de 47 yardas de Josh Lambo con 31 segundos por jugar en el segundo periodo.
La defensiva de los Raiders fue la que mantuvo al equipo en la pelea al frenar al ataque de San Diego, que no pudo hacer nada en tres posesiones consecutivas y más tarde sufrió un safety cuando Rivers fue capturado en la zona final por Denico Autry para acercar 17-12 a Oakland en la pizarra.
En sus siguientes dos ataques, los Cargadores fallaron un intento de gol de campo y sufrieron un balón suelto provocado por Malcolm Smith y que S Roberts regresó a la yarda 3 de San Diego, desde donde Carr se conectó con Michael Crabtree una jugada más tarde para, con la conversión de dos puntos, poner 20-12 arriba a los Raiders con 4:42 por jugar en el último cuarto.
Con un ataque de 11 jugadas en 3:47 minutos, Rivers preparó el gol de campo de 45 yardas con el que Lambo empató el marcador a 20.
Carr y su ofensiva tuvieron aún más de 40 segundos para buscar el triunfo en tiempo regular, pero como si se tratara de un capricho del destino ante la posibilidad de ver a sus Raiders en televisión a partir de 2016, los aficionados en el O.co Coliseum fueron agasajados con el tiempo extra gracias a los de negro y plata y, en parte, por su culpa tras cometer varios castigos en ese último ataque del cuarto periodo.
Oakland atacó primero en el tiempo suplementario y en una serie en la que los Raiders cometieron varios castigos y los Cargadores les dieron vida por un dudoso castigo por un golpe casco con casco, Carr llevó a su ataque hasta la yarda 13 de San Diego, desde donde Janikowski conectó el eventual gol de campo del triunfo de 31 yardas.
Los Raiders, que se irían a Los Ángeles de concretarse un plan en conjunto con los Cargadores para la construcción de un estadio en esa ciudad, aseguraron el triunfo en su posible despedida de Oakland al forzar un pase incompleto de Rivers en cuarta oportunidad.
En la Semana 15, fueron los Cargadores los que tuvieron oportunidad de despedirse de sus aficionados en el Qualcomm Stadium con una contundente victoria sobre Miami.