Los Raiders quedan oficialmente fuera de Play Off
La temporada que prometía emociones fuertes en Oakland, aunque tuvo algunas, ya terminó y con ella la carrera de Charles Woodson.
Fue bonito mientras duró
Se acabó lo que se daba. Los Raiders están oficialmente eliminados de la lucha por los Play Offs. Atrás queda aquel dos de noviembre en el que Oakland se ponía como líder por la wildcard tras una extraordinaria victoria ante los Jets. Mes y medio después se encuentran sin posibilidad de acceso a la postemporada y con un récord de 6-8 a falta de dos jornadas para finalizar la temporada regular, lo que significa que no tendrán balance positivo por 13ª vez consecutiva, que se dice pronto. Si bien es cierto que no se suponía que los Raiders fueran a alcanzar el status de posible equipo de Play Off, haber dejado pasar una oportunidad tan grande deja un sabor agridulce a un equipo que lo ha llegado a tener en su mano. Especialmente sabe mal por Charles Woodson, que acaba de anunciar su retiro y se va de camino a Canton, para que su figura quede custodiada para la posteridad.
En la otra cara de la moneda, es una temporada en la que pueden sacar muchas conclusiones positivas de cara al futuro. El crecimiento de Carr, que por momentos fue uno de los mejores Quarterbacks de la competición, pese a que la temporada se le ha terminado haciendo larga, como a su propio equipo. Khalil Mack ya es tal vez uno de los cinco mejores defensivos de la competición y, Amari Cooper, pese a tener una temporada turbulenta, alcanzó las 1000 yardas el pasado domingo, algo que no hacía un WR de los Raiders desde el año 2005. Por primera vez en mucho tiempo, los cimientos ya están bien puestos en Oakland y hay muy buen material sobre el que ir construyendo.
Los Chiefs, en la misma tesitura que hace tres semanas
Desde hace ya casi un mes, tanto Chiefs, como Steelers, como Jets, han ganado todos sus partidos. De nuevo, sigue el triple empate en la pelea por dos plazas de wildcard. Los Jets volvieron a sufrir en Dallas, Pittsburgh tuvo que remontar en la segunda parte para ganar a Denver y los Chiefs, sin hacer prácticamente nada, tuvieron una tarde plácida en Baltimore. Empate de rércords (9-5) con los Chiefs en situación de ventaja frente a sus oponentes gracias a su mejor récord en partidos de conferencia. El calendario, también es favorable para los jefes, con dos partidos en casa ante Browns y Raiders. Los Jets, sin embargo, reciben esta semana a los Patriots y visitan a los Bills en la última jornada, y a buen seguro Rex Ryan tendrá sed de venganza. Tal vez los Jets sean quienes tienen más complicado el billete para la postemporada.
El ataque de los Broncos vuelve a desaparecer
Punt-Punt-Punt-Punt-Punt-Punt-Interception-Downs-Downs. Este fue el balance ofensivo de los Broncos en la 2ª parte. Esta vez la defensa no pudo aguantar el ritmo, y mientras Antonio Brown hacía lo que quería con un jugador del nivel de Chris Harris Jr, la derrota subía al marcador. Por primera vez en esta temporada, Denver siente la presión de verse obligados a ganar. Los Chiefs ya están a solo un partido y si éstos ganan a Cleveland a casa, podrían ponerse como líderes en la AFC West si los Broncos no hacen los deberes ante unos Bengals ahora liderados por AJ McCarron y que ya están matemáticamente clasificados para Play Off. Después de una maravillosa primera parte de Osweiler ante Pittsburgh, un 3-17 en pases durante la 2ª parte vuelve a traernos QB-controversy en Denver esta semana. Tan solo el enorme colchón de victorias conseguido por los Broncos en el primer tramo de la temporada hace que vayan a ganar una división en la que ha reinado la irregularidad y el sinsentido durante esta temporada.
Marcus Peters, lanzado a por el DROY
Peters no es, al menos por ahora, un shutdown corner. No hace desaparecer un lado del campo. Los Quarterback rivales le buscan. En ocasiones le explotan y tiene drives en los que se ve superado por su par en acciones consecutivas. A priori, parece la descripción de un cornerback de clase baja. Nada más lejos de la realidad, Marcus Peters es el mejor defensive back de la NFL a la hora de jugar el balón gracias a su anticipación y sus ball skills. A falta de dos partidos para que finalice la temporada regular ya ha interceptado siete balones (dos devueltos a la end zone rival) y ha defendido 23 pases. Como buen playmaker, sus jugadas siempre aparecen cuando el equipo más lo necesita y es una fuente inagotable a la hora de inyectar momentum con cambios de posesión y dinámica del partido. Con la actuación ante Baltimore se ha despegado como favorito para ganar el DROY.
Melvin Gordon, adiós a una temporada para olvidar.
Melvin Gordon ha tenido el balón en sus manos durante 217 snaps y en ninguno de ellos ha sido capaz de anotar un Touchdown. Su promedio de yardas por carrera es de 3,5 yardas. Ha dejado caer el balón de las manos hasta en 6 ocasiones. Su temporada, finalizada de forma prematura por lesión, ha acabado con 641 yardas de carrera y 0 anotaciones. Un auténtico desastre. Empeorando notoriamente la primera temporada de Trent Richardson como profesional. Los Chargers dieron a cambio cuatro elecciones de draft para subir dos puestos y poder elegirle, así que el papel para la franquicia es realmente complicado. No obstante, con una franquicia que puede que dentro de poco anuncie su traslado a Los Angeles, tal vez ahora Gordon sea el menor de sus problemas.