Smith y la defensa derrotan a los aguerridos Chargers
La seguridad del quarterback de Kansas City y la brillante labor de la unidad defensiva superan en un agónico encuentro a Rivers y sus Chargers.
Si algo caracterizaba a priori el desigual partido entre los Kansas City Chiefs y San Diego Chargers era la impresionante racha de pases sin ser interceptado a cargo del quarterback Alex Smith. Siempre cuestionado por su falta de valentía a la hora de atreverse con los lanzamientos profundos a sus receptores, la consistencia de Smith ha sido una de las claves del tremendo giro que ha dado la campaña de los Chiefs, que mantienen la quinta plaza dentro de los playoffs en la AFC.
Sin embargo, el partido en el Arrowhead Stadium, estuvo marcado por una lluvia constante que condicionó la evolución de los primeros compases del encuentro en los que San Diego fue capaz de parar con su defensiva al tenaz ataque de los Chiefs. Tan destacado fue su rendimiento que la brillantísima racha de pases sin intercepción de Smith se acabó con el número 312, apenas a 46 del récord que estableció un tal Tom Brady entre 2010 y 2011 con 358.
Jason Verrett fue el culpable de que no tuviéramos emoción al respecto pero la lluvia y el viento evitó que San Diego fuera capaz de materializar un field goal. Tampoco un fumble en un retorno local fue aprovechado por los californianos y ahí fue cuando la mejor versión de Alex Smith entró en escena.
Combinando pases seguros, profundos como el del touchdown de 44 yardas a Albert Wilson, e inteligentes carreras, ya fuera por el propio Smith o del bloque en su conjunto para mover las cadenas y situar a distancia de field goal a su equipo para lograr el 10-0 en el descanso.
No obstante, la defensa de San Diego no dejó de mantener el tipo en todo el apretado encuentro y un field goal al inicio de la segunda parte puso el 10-3 en el marcador.
Pero si también hay una constante en la campaña de los Chiefs es su brillante defensa, una que mantuvo la presión sobre Philip Rivers en todo momento y cuando el jugador de los Chargers pudo respirar, un drop de Floyd cuando estaba totalmente solo, la Diosa Fortuna también estuvo conchabada con los de Kansas City.
Y si ella estaba distraída, ahí estaba la defensa de los Chiefs para volver a tomar el mando de las operaciones.
Sin embargo, el brillante papel de la defensiva de los Chargers hizo que el partido no estuviese decidido ni siquiera cuando faltaban cinco minutos para el final pero ni el momento de redención para Malcolm Floyd con una increíble recepción fue suficiente para contener la implacable presión del front four de los Chiefs que cerraron el grifo a las opciones de los Chargers con sacks en jugadas consecutivas o al menos uno tenía la sensación de ser así.
Cuando un equipo lleva dos semanas sin conseguir un touchdown, parece poco probable conseguirlo contra la gran defensa de los Chiefs… O a lo mejor si puede ser el caso.
Philip Rivers es un viejo guerrero y su insistencia a la hora de renunciar a este partido es algo digno de figurar en los anales de la historia. Agarrándose de forma agónica al choque, convirtiendo cuartos down como si no fuera la cosa con él, los distintos envíos de Rivers hacia la end zone rival según se agotaba el tiempo no consiguieron los resultados deseados y se fueron con las manos vacías.
De esta manera, los Chiefs mantienen esta posición de privilegio y siguen confiando en meterse en los playoffs vía AFC.