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MINNESOTA TWINS

¿Puede ser Minnesota la gran sorpresa de la MLB en 2015?

Con su sexto triunfo consecutivo, los Twins se agarran a la segunda wild card de la Liga Americana y se postula como una de las revelaciones del año.
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La llegada de Miguel Sanó ha inyectado mucho músculo al turno de bateo de los Twins.
Brian BlancoAFP

Si, lo sé. El propio titular no deja de ser una provocación e incluso hay quien podría calificarlo de utopía pero… ¿Alguien pensaba en los Minnesota Twins como el segundo equipo de wild card en una competitiva Liga Americana? ¿Les poníamos por delante de equipos tan poderosos, que además no son líderes de división, como los Baltimore Orioles, Los Ángeles Angels o el favorito para ganar el título según Sports Illustrated, los Cleveland Indians? ¡La respuesta a todo lo anterior es un rotundo no!

Pero aquí nos encontramos, una vez disputados 126 de los 162 partidos de los que se compone la temporada regular, con los Minnesota Twins ocupando esa posición de privilegio que le permitiría enfrentarse a los New York Yankees a partido único, una vez que los Toronto Blue Jays les han echado de forma inmisericorde del liderato de la División Este de la Liga Americana.

Tal como ha ocurrido con otras de las sorpresas que ha dado la Major League Baseball a lo largo del 2015, los Minnesota Twins han adelantado el calendario respecto a su condición de equipo aspirante a hacer algo significativo y reeditar viejos laureles, como los conseguidos entre 2002 y 2010, con seis títulos de la División Central de la Liga Americana.

Poco queda de aquellos equipos… Joe Mauer y no mucho más y eso que ya no se parece nada a aquel catcher que ganó el MVP y tres títulos de media de bateo.

Como ocurre en tantos casos y más con equipos que no pertenecen a mercados grandes, la reconstrucción ha llegado vía draft y por fichajes del siempre inagotable mercado internacional.

Excelentes ejemplos de ambos casos los tenemos tanto en los jóvenes Byron Buxton y Miguel Sanó. No es de extrañar que ambos ya formen parte del plantel que dirige con maestría el gran Paul Molitor, uno de los grandes favoritos al entrenador del año en la liga junior.

Hay un dato tremendamente revelador respecto a la unión de Buxton y Sanó en las Grandes Ligas. Con los dos en el mismo turno de bateo, los Twins no conocen la derrota. Es cierto que tampoco es que lleven jugando muchísimas semanas pero el poderío ofensivo que aportan no es algo baladí y es una muestra de lo que está por venir, todo ello redondeado por el enorme Brian Dozier, uno de los jugadores más infravalorados de la liga.

Mientras que Buxton es un soberbio centerfielder que puede ser All-Star en un futuro no muy cercano y potencial candidato a MVP, Sanó es la clásica presencia poderosa que hace mejor al resto de compañeros desde la cuarta posición de la alineación.

La sufrida victoria pero victoria a fin de cuentas sobre Chris Archer y los Rays en la noche de ayer es una buena muestra de la resistencia que están mostrando estos Twins. En un choque en el Archer logró doce strikeouts, los de Minneapolis sacaron petróleo de sus oportunidades con la pizca de fortuna que siempre viene fenomenal para acumular su sexta victoria consecutiva, todas a domicilio y la mejor marca como visitantes desde agosto de 2007.

Curiosamente, los Twins es una franquicia que no hace nada especialmente bien. Son undécimos en el ranking ofensivo, vigesimosegundos en efectividad pero tienen el octavo mejor porcentaje defensivo.

Lo que si hacen muy bien es batear con corredores en posición de anotar, es decir, conectar cuando tienes corredores en segunda y tercera base. Como he explicado en numerosas ocasiones, el mejor equivalente que se puede encontrar es el número de disparos a puerta. La clave está en que los Twins son los segundos mejores, tras Toronto, a la hora de aprovechar sus opciones y cuentan con un bullpen bastante solvente liderado por el All-Star Glen Perkins.

La lógica nos dice tantas y tantas veces que el tiempo corregirá toda incoherencia que se pueda ir produciendo a lo largo de una larguísima temporada de 162 partidos. Y el calendario nos arrojará luz sobre lo que está por venir para los Twins, una de las cenicientas de la competición.

Los duelos que tendrá que disputar desde ya mismo dirán mucho sobre sus posibilidades. Los próximos nueve encuentros que tendrá que disputar contra Houston Astros y Kansas City Royals, seis de ellos fuera de casa, serán capitales.

En una temporada absolutamente impredecible, no faltan adeptos a la causa de los Minnesota Twins. En cualquier otro deporte, uno de los potenciales peores equipos de la competición no tendría ninguna opción de hacer algo grande.

¿Acaso alguien duda de que el béisbol es el mejor deporte que existe?