Blanco a Cardenal: "Nunca hubo un mayor intervencionismo"

El día anterior, la ausencia de Miguel Cardenal y Ana Muñoz Merino en la Gala del COE despertó las sospechas. Las relaciones entre el Comité Olímpico y el CSD no son buenas desde la grieta que se abrió tras la frustración de la candidatura de Madrid 2020, pero el agujero cada vez es más profundo. Ayer, Alejandro Blanco se encargó de refrendarlo. “Nunca en los últimos años ha habido tanta intervención”, dijo por la mañana en Radio Marca. “Pido un respeto para la independencia del deporte”, ratificó a AS por la tarde, después de una reunión del ADO celebrada en el COE, en la que se reencontró con Cardenal y Muñoz. Una foto para el morbo... “Todo ha sido muy cordial”, dicen desde la sede olímpica y desde el CSD.

“Yo no ataco a nadie, defiendo al deporte español, cuyos dirigentes son reconocidos en el mundo y merecen que se respete su independencia”, dice Blanco, que arranca sus críticas desde la afirmación de que “existe un enorme malestar en las federaciones deportivas”.

“Las federaciones son entidades privadas que cumplen funciones públicas. Yo no digo que no se controle el gasto procedente de las subvenciones, pero sí pido que se respete la parte privada, la independencia que debe tener el deporte y que está incluso reconocida por una resolución de Naciones Unidas. Nunca ha habido tanta intervención en el deporte español como ahora”, añade Blanco.

Desde hace dos años, hasta 28 federaciones han estado sometidas a un estricto control económico, con reuniones periódicas en el CSD ante media docena de técnicos, entre ellos Fernando Puig de la Bellacasa, subdirector de Inspección, y Rosa Ortega, subdirectora de Alta Competición. En algunas se han detectado irregularidades graves: Tiro con Arco, Espeleología, Caza, Bolos, Kickboxing, Rugby... “Sólo velamos por que el dinero público se gaste en lo que la Ley establece. En lo deportivo no hay ninguna injerencia”, explica Ana Muñoz.

El presidente del COE se pronuncia a favor de ese control: “Ha existido siempre, todo el dinero está auditado. Las federaciones no tienen ningún miedo a eso, porque han sido evaluadas desde hace tiempo”.

“Me refiero al respeto por la independencia del deporte”, insiste Blanco. En el fondo de sus reivindicaciones se encontraría más bien la Ley de Transparencia y Buen Gobierno, que desde el reciente 11 de diciembre obliga a publicar contratos y sueldos de los órganos de la Administración, pero también en aquellos que reciben subvenciones públicas. Sería el caso de las federaciones deportivas. También del propio COE.

Ahí podría estar la razón por la que la Federación de Fútbol ha renunciado a las subvenciones. Las relaciones entre la RFEF y el CSD están igualmente muy deterioradas. Blanco también salió en defensa de Ángel María Villar, a la vez que se ofreció a mediar: “Nadie puede dudar de su compromiso. Hay que esperar a que hable. Si está con Blatter o Platini es porque está defendiendo al fútbol español. Esa es su misión”.

Blanco también extendió sus críticas a los recortes de subvenciones, “que se elevan a un 70%”, y a la licencia única, “que ha creado un problema con las Comunidades Autónomas”.