El Atlètic Barceloneta se proclamó este viernes campeón de la Supercopa de Europa de waterpolo por primera vez en su 101 años de historia al imponerse al Spartak Volgograd (12-7) en la piscina Sant Jordi . Gonzalo Echenique , autor de seis de los doce goles, lideró la victoria del equipo de Chus Martín ante un Spartak que aguantó las acometidas durante el primer tiempo. Tras el descanso, la superioridad del Barceloneta dejó al equipo ruso en un segundo plano. El conjunto marinero saltó a la piscina Sant Jordi con las ideas muy claras y no tardó demasiado en hacerlo visible en el electrónico. Albert Español marcaba el primer gol del Barceloneta en una Supercopa de Europa para el deleite del millar y medio de espectadores que aclamaban a sus jugadores. El Spartak Volgograd, volcado en ataque, puso a prueba a López Pinedo en multitud de ocasiones y no fue hasta el minuto cuatro que Yurchik batía al guardameta barcelonés para poner el empate en el marcador de la piscina barcelonesa. El Atlètic Barceloneta no tardó demasiado en sobreponerse y los tantos de Echenique y Felipe Perrone permitían a los catalanes distanciarse del Spartak, que recortaba distancias antes de finalizar el primer cuarto gracias al gol de Ashaev . Nada más comenzar el segundo asalto, Albert Español transformaba magistralmente una pena máxima y se apuntaba la segunda diana en su cuenta particular. El equipo de Vladimir Karabuto , que cada vez era menos rival para el Barceloneta, respondería justo después con el segundo tanto de Yurchik. Un Echenique estelar ponía el 5-3 instantes antes de llegar al descanso y permitía al conjunto de Chus Martín tomarse un respiro después de un primer tiempo muy exigente. Tras la reanudación, el Barceloneta fue una apisonadora ante un Spartak que pagó el esfuerzo realizado en el primer tiempo. Un gol de Español y tres zurdazos de "Chalo" Echenique cerraban un tercer cuarto en el que López Pinedo acabó imbatido. A pesar de la resistencia de los rusos, que no supusieron ningún problema para el conjunto catalán en los últimos ocho minutos, los marineros acabaron de redondear el partido goleando y llevando la primera Supercopa de Europa a las centenarias vitrinas del Atlètic Barceloneta.