Balonmano
El flamante Atlético Valladolid nace en la División de Honor B
Juan Carlos Sánchez, presidente del club, niega cualquier vínculo o relación con el extinto Valladolid. La meta es llevar al club a la Asobal, dice
El Atlético BM Valladolid, que preside el empresario Juan Carlos Sánchez Valencia, jugará la próxima temporada en la División de Honor B, tras conseguir la cesión gratuita de la plaza del Club Pozoblanco de Córdoba, con el objetivo de "subir a Asobal".
Sánchez Valencia, en una rueda de prensa, ha explicado que "el nuevo club no tiene nada que ver con el anterior -el extinto BM Valladolid- y la forma de trabajar también será diferente, ya que habrá un equipo de elite, pero se va a dar la misma importancia a la cantera".
"Queremos promocionar los clubes vallisoletanos y permitir el desarrollo del balonmano en la ciudad, fomentando la enseñanza de jugadores y entrenadores, puesto que en Valladolid hay un gran nivel y se valora mucho fuera", ha matizado el presidente del Atlético Valladolid.
Por ahora, el primer logro ha sido conseguir la cesión "gratuita", tal y como ha advertido el dirigente vallisoletano, de la plaza en División de Honor B, que deberá confirmar el Comité de Competición de la Federación Española de Balonmano, "lo cual es un mero trámite para analizar el expediente de cesión".
La directiva de la nueva entidad, que "variará" según se "vayan concretando los esquemas", espera "en un plazo de dos semanas" poder "comenzar el proyecto", para lo cual deberán concretar quién será el cuerpo técnico tanto del equipo de Plata como el que dirigirá la base "con lo que será un grupo plural", ha indicado.
Todo apunta a que el que fuera entrenador del Cuatro Rayas Valladolid, Nacho González, se hará cargo del Atlético BM Valladolid en División de Honor B ya que, según Sánchez Valencia "tiene todas las papeletas", si bien "todo se irá concretando en los próximos días".
Lo que tiene claro es que "aunque tener un presupuesto para jugar en B es fácil de conseguir", su meta es "ir más allá, ya que el objetivo, desde el principio, es recuperar el lugar de Valladolid en la liga Asobal" y, por tanto, van a intentar "hacer un presupuesto a tres años bajo esa premisa", ha asegurado.
Respecto a la masa social, el máximo responsable del nuevo club confía en que los aficionados al balonmano se ilusionen con el proyecto "para superar los mil socios y, si se llega a los dos mil, mejor", aunque son conscientes de que "heredan" una situación "de confusión y de promesas incumplidas" del desaparecido BM Valladolid.
"Necesitamos tiempo para demostrar que somos gente diferente cuyo fin es devolver a Valladolid a la élite del balonmano y potenciar la cantera sin olvidar a los jugadores y entrenadores con experiencia, que también pueden aportar muchas cosas", ha concluido.