Olazábal recibe el Príncipe de Asturias y homenajea a Seve

Nervioso, aunque sin perder la sonrisa, y visiblemente emocionado, conteniendo las lágrimas por momentos, José María Olazábal recogió el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes 2013 despertando los aplausos más calurosos de los presentes y las palabras más cariñosas del Príncipe Felipe en su discurso en el Teatro Campoamor. Reconocido por el jurado como "digno sucesor del espíritu de Severiano Ballesteros", el recuerdo a la figura de su mentor, quien recogiera el mismo galardón en 1989, acompañó al golfista vasco en todo momento. Don Felipe quiso recordar también la figura de su "querido Seve", dando especial relevancia a los triunfos de Olazábal, "fruto de mucho sufrimiento, superado con un espíritu de sacrificio y una fuerza de voluntad que forman parte del conjunto de cualidades humanas que todos reconocemos en él".

El Príncipe calificó al golfista guipuzcoano de Hondarribia de "modelo de deportista total", y se dirigió al propio Olazábal con un emocionado: "Gracias maestro, y no solo por serlo del golf". Y destacó de sus triunfos "el momento culminante en la Ryder Cup de 2012, donde capitaneó a Europa con una capacidad extraordinaria de liderazgo y motivación".

Tras recoger el galardón, el golfista celebró al borde del escenario su reconocimiento con un golpe imaginario, aunque sin palo ni hoyo al que dirigir una bola que tampoco existía ayer en el Campoamor, donde sí estuvo muy presente el golf, y el recuerdo a Severiano Ballesteros.