Fernández-Castaño sigue "la progresión" en Estados Unidos

Me encanta que me llamen Gonzo", le decía Gonzalo Fernández-Castaño en Twitter a un aficionado. El madrileño, de 33 años, suele responder a las preguntas que se le formulan en la red y que el pasado fin de semana se multiplicaron con su buen papel el US Open. Gonzalo fue décimo en el infernal campo de Merion, en lo que es su mejor resultado en los 13 majors que ha disputado hasta ahora. "Ha sido muy buena semana, superar el corte era un éxito y el top-ten mucho más. Debo seguir trabajando así y a ver si un domingo me encuentro en la lucha final".

Desde que superase los problemas de espalda que le martirizaron hasta 2011, este contemporáneo de Sergio García y Rose no para de crecer. "Creo que mi progresión es positiva", cuenta un hombre que se ha abierto de lleno las puertas de Estados Unidos, donde ya ha jugado ocho torneos este año.

Rendimiento. Fue tercero en el Arnold Palmer, 20º en el Masters y ahora este top-ten, que le asegura participar en el US Open del próximo año. En esos tres torneos se ha cruzado en partidos con Tiger Woods y su ruidoso público. En Merion fue mejor que el icono mediático.  El madrileño, que tiene la tarjeta temporal del PGA Tour, sueña con hacerse fijo en el golf de Estados Unidos: "Es la gran liga y el estilo de vida de allí me gusta".