Un tornado se interpone entre Tiger Woods y el número uno

“Justin Rose me dice que el campo está destrozado: torres de tv, carpas, gradas venidas abajo... Se ha ido la luz en todo el club”, decía este domingo en Twitter Gonzalo Fernández Castaño, sexto en el torneo Arnold Palmer, que, minutos después del anuncio del madrileño, tuvo que suspender su cuarta jornada por el tornado que dejó desolado el campo de Bay Hill en Orlando. La reanudación será este lunes a las 15:00 (hora española) y Gonzalo, que jugó tres hoyos, tendrá la oportunidad de culminar la mejor actuación de su vida en el Circuito Americano (en el European Tour tiene seis victorias).

La tormenta provocó también que Tiger Woods no pudiera coronarse número uno del mundo, algo que logrará si se lleva el torneo. El estadounidense, vestido de rojo y negro, salió lanzado con un birdie en el 2 que le deja con tres golpes de ventaja sobre Bradley, Duke, Huh y Fowler y con 16 hoyos por delante. El que ya acabó el torneo fue Sergio García, que tras escalar a un árbol para golpear la bola, se retiró por molestias en el tendón de Aquiles y en el hombro y no podrá continuar con su racha de buenos resultados.

Este lunes, desenlace de un Arnold Palmer que el Tigre se ha llevado ya en siete ocasiones y que puede devolverle a lo más alto del ránking, una posición que abandonó el 30 de octubre de 2010 y a la que puede regresar más de dos años después.