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MUNDIAL 2013

Karabatic no afronta con espíritu revanchista el Mundial

El francés Nicola Karabatic rompió su silencio para asegurar que no afronta el Mundial de España como una revancha contra quienes le atacan.

Nikola Karabatic.
FREDERICK FLORINAFP

El francés Nicola Karabatic, en el centro de múltiples críticas en su país por su bajo rendimiento en el Europeo y por su implicación en un caso de apuestas deportivas ilegales, rompió su silencio para asegurar que no afronta el Mundial de España como una revancha contra quienes le atacan.

"Cuando eres joven tienes la rabia de ganarlo todo. Ahora trato de cambiar, de mostrarme más potente, tengo ganas de divertirme. Este Mundial es un momento más para compartir con mis compañeros", afirmó el jugador en una entrevista que hoy publica el diario 'L''Équipe'.

Karabatic, durante años considerado el mejor jugador del mundo, señaló que no se encuentra en su mejor momento personal, pero aseguró que es capaz de relativizar y dejar todos los problemas fuera del terreno de juego.

Así lo ha mostrado en los últimos amistosos de preparación de Francia para el Mundial de España. En el último, disputado hace dos días contra Argentina, marcó 15 tantos, lo que muestra su total implicación en el conjunto que dirige Claude Onesta.

"Estoy bien, contento de estar con mis compañeros, de sentir la adrenalina que sube cuando se acerca una nueva aventura", afirmó. Pero sin olvidar "todo lo que ha pasado", señaló Karabatic, que recordó que está "inculpado" por un caso de apuestas ilícitas y que las relaciones con su club, el Montpellier, no son buenas.

Todos esos problemas, unidos a la muerte de su padre, le han llevado a "mirar la vida de forma diferente" y restar importancia "a las victorias o a las derrotas" porque "lo que verdaderamente cuenta son las aventuras humanas".

Karabatic señaló que "se ha exagerado" el caso de apuestas ilegales en el que están implicados él, su novia, su hermano (también jugador de balonmano) y varios jugadores más del Montpellier.

Todos ellos apostaron contra su club en un partido de finales de la pasada temporada, cuando el Montpellier ya se había proclamado campeón de Francia, lo que les aportó pingües beneficios económicos, antes de que las autoridades detectaran las disfunciones.

Los jugadores admitieron las apuestas pero negaron haber amañado el partido en el que muchos de ellos, incluido Karabatic, ni siquiera participaron por una lesión.

"Ha habido exageración y ensañamiento" en la acusación de las apuestas ilegales, señaló el jugador, que indicó que hay cosas más graves que han recibido menos atención mediática.

Lo que sí que reconoció es que el caso de las apuestas ha cambiado su relación con el Montpellier, aunque descartó tener ofertas de otros clubes para abandonar la entidad francesa. "La pasada temporada me implicaba más en la vida del equipo, en las estrategias, en las formas a seguir para crecer. Ahora lo he dejado para pensar más en mi mismo y dejar el resto a un lado. Pero doy el cien por cien en lo que hago", señaló.

Karabatic aseguró que en ningún momento ha mostrado su deseo de abandonar el Montpellier, con el que tiene contrato hasta junio de 2016.

En los últimos días, tanto él como su agente han acusado a los dirigentes del Montpellier de querer venderle. "Lo único que sé es que en este momento, ninguna oferta ha llegado a mi agente", aseguró Karabatic, que dijo sentirse "bien en Francia" y que aseguró que los grandes clubes del continente tienen menos recursos a causa de la crisis.

El jugador también se refirió a las críticas por su actuación en el pasado Europeo y negó que se deban a su mayor presencia en el terreno mediático.

"Han buscado mil explicaciones a mi fracaso en el Europeo (...) Lo cierto es que no lo hice bien. Y es duro admitir la crítica cuando uno sólo ha fracasado en una competición en los últimos diez años", señaló.