Por un día estamos los dos de acuerdo: "Hoy gana Madrid"

Manolete

Nos vemos hoy, Tomás, en la Plaza de Oriente. Las cañas corren de mi cuenta para brindar y festejar los Juegos Olímpicos que se merece Madrid desde hace tiempo. Ya era hora de que colchoneros y blancos estemos unidos por una causa común. En el 2016 nuestra ciudad tiene que ser la referencia. Ya lo dice nuestro lema: De Madrid al cielo. Espero que la gente del COI sepa reconocer la ilusión que tenemos los españoles por este triunfo y que siempre abrimos las puertas de nuestras casas a los que vienen a conocernos.

Socio, seguro que vamos a ganar. Todo está a nuestro favor. El corazón de Madrid es el más grande que existe en el mundo. Estoy deseando dejar el Calderón por un pedazo de Estadio Olímpico. Nos vemos con nuestras banderas para festejarlo y que en Copenhague sepan que los Juegos por estas tierras van a ser una fiesta permanente, y que a gracia y simpatía no nos ganan ni en Río, ni en Tokio, ni en Chicago. Saca pecho, y mejor, deja de escribir que te invito a cenar. No podemos fallar. Por una vez, el deporte va a triunfar.

Roncero

Manolete, ya era hora de que tú y yo enterráramos el hacha de la discordia y uniéramos nuestras fuerzas por la misma causa. La más noble de todas. Madrid 2016 interesa a atléticos y merengues por igual, porque esta ciudad cosmopolita, hospitalaria y única se merece por fin que se la reconozca con un acontecimiento que demostraría la grandeza y el compromiso de los madrileños. Los gatos (nacidos o adoptados) llevamos años soñando con ver encendida la llama olímpica para orgullo de nuestros padres y abuelos, que se dejaron la salud durante décadas para que ahora tú y yo presumamos de lo chulo que está el Foro.

Manolete, esta tarde nos vemos en la Plaza de Oriente y uniremos nuestro aliento para aplaudir a Raúl, el mejor embajador que haya tenido jamás la capital del reino. Raúl defenderá la bandera de Madrid 2016 con la fiereza y ejemplaridad con la que se deja el alma por ese escudo que acabarás respetando como a ti mismo.

Amigo, hoy nos vamos a Cibeles de la mano olímpica. ¡A por ellos!