Ciclismo | Giro de Italia
Iban Mayo recupera su talento y gana en Italia
Tampoco se pasó este Giro sin una victoria española. Iban Mayo volvió regalar otra dosis de su gran clase y ganó destacado la antepenúltima etapa. Hoy los favoritos se juegan su puesto final en una contrarreloj de 43 km. Di Luca lo tiene muy a favor.
Iban Mayo ha vuelto. Había quien lo dudaba tras dos años de chascos en las citas importantes. Pero la clase nunca se pierde. Tan sólo estaba enquistada. Ayer se desatascó y volvió a galopar sin cadena para ganar la 19ª etapa, la victoria número 90 del ciclismo español en el Giro.
Una fuerte y constante lluvia endureció una jornada en la que los favoritos gastaron sus penúltimos cartuchos en Fugazze, el último puerto de primera del Giro. Piepoli, el mismo líder Di Luca y Mazzoleni lanzaron sus andanadas. Pero en la cima hubo empate técnico.
Los nervios se calmaron y en el descenso, a 70 km de meta, Mayo vio su ocasión, como Alberto Losada, que siguió su estela. Al rato ya estaban acompañados por los italianos Visconti, Marzano y Garzelli, el danés Rasmussen y el ruso Petrov. Pero 17 km más tarde, Mayo y Losada se vuelven a ir juntos, hasta que en la ascensión al último puerto, a 20 km de meta, Mayo se marchó solo para entrar con 43 segundos de ventaja sobre su primer perseguidor.
Como Merckx.
Mayo, ganador de la etapa de Alpe d'Huez en 2003, parecía Eddy Merckx entre el 9 de mayo y el 13 de junio de 2004. En ese lapso ganó (¡y cómo!) la Clásica de Alcobendas (y dos etapas), la Subida al Naranco, la Vuelta a Asturias y el Dauphiné Liberé (y dos etapas) dándole todo un repaso a Armstrong, especialmente en el Mont Ventoux. El gran duelo se iba a repetir en el Tour 2004, pero Mayo no supo manejar la presión a que se le sometió, sobre todo en Euskadi. Desde entonces estaba bloqueado. Pero no vamos a hablar del próximo Tour. Dejemos al genio que se exprese libremente.