Una presentación de lo más agradable

Todo salió bien. Campo lleno de público entusiasta, rival digno y esforzado, pero batible, jugadas de exhibición, magníficos detalles de Beckham y goleada, aunque se hiciera esperar. Un partido digno de la presentación del sexto galáctico, del que el madridista empieza a sentirse satisfecho. Lanzó dos faltas, las dos muy bien. No fueron gol pero ahí le anduvieron. Un pase larguísimo a Ronaldo, perfecto, medido para su carrera. El balón llegó con medio gol, pero no era la noche de Ronaldo. Por lo demás, trabajo constante en la derecha, con apoyo en el centro. Bien.

Y mejor todavía Figo, a la izquierda. Participativo, buscando, encarando con más confianza que en la derecha. Le sobran recursos y sus mañas en esa banda hacen que se eche menos en falta su velocidad perdida. Estupendo Zidane, cuyo magisterio cautivó a los chinos y magnífico y espectacular Roberto Carlos. Raúl intervino poco en juego, perdido en la maraña defensiva del Dragon Team, que se embotelló ante los galácticos. Y un chasco Ronaldo, culpable de que al descanso no se llegara con goleada. Ya no hay duda: la castidad no le prueba. Le quita alegría resolutiva.

Y muy bien el resto, los que no son galácticos. Seria pareja de centrales, bien cubierta por Makelele y magnífico el ir y venir de Míchel Salgado. Y cuando llegaron los cambios y el Dragon Team se confió y salió de la cueva se pudo ver que en la reserva hay calidad para lucirse y golear. Morientes y Portillo mejoraron a Ronaldo y dejaron la duda. ¿Salió Morientes antes por enseñarle en el escaparate o porque está delante? Como queda otra duda: ¿por qué Celades y Cambiasso en el 72’? ¿Cuentan más de lo que creemos? Y un detalle: los dos centrales jugaron todo el partido. Mensaje a Florentino.