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Primera | Rayo

Iriondo sustituye a Gustavo Benítez

Álvaro Ruiz-Mateos: "Había que tomar otro camino para la salvación"

<b>AS EN SU ÚLTIMO DÍA.</b> El último entrenamiento de benítez. Gustavo Benítez dirigió ayer el último entrenamiento del Rayo

Gustavo Benítez es ya historia en el Rayo. El club decidió ayer destituirle como entrenador del equipo franjirrojo y situar a Antonio Iriondo (Moscú, 1953), que hasta ahora estaba al frente del filial, en su lugar. El acuerdo con el nuevo técnico es hasta el 30 de junio. Mariano Madrid será su ayudante.

La reunión de la junta directiva de la entidad en el palco de Vallecas al término del partido ante el Athletic, de la que AS se hizo eco en su edición de ayer, fue el preámbulo de la caída de Gustavo Benítez, que se certificó a las 14:50 de ayer. Álvaro Ruiz-Mateos comunicó a esa hora al técnico paraguayo y a su ayudante, Gualberto Jara, que la relación laboral entre ellos y el club quedaba extinguida.

El director general del Rayo explicó posteriormente por qué se había tomado esa decisión: "La causa son los resultados. Quedan nueve partidos, estamos a tres puntos de la salvación y había que tomar un camino distinto porque la permanencia es posible. En este deporte mandan los números. Además el equipo no da batalla, juega con muchos nervios y necesita un revulsivo. La mejor opción es un hombre de la casa, que conoce el club a la perfección. Iriondo es el mejor sustituto que podemos tener. Benítez me ha dicho que lo que sentía era habernos defraudado".

El nuevo técnico:

"Con más tiempo hablaríamos de entrar en la Champions"

"El Rayo cierra filas. Cuando alguien está mal se acude siempre a casa. La situación es la que es, pero tengo una fe tremenda, por eso considero esto como una oportunidad, no como un marrón. Habiendo tenido más semanas para trabajar incluso hablaría de meternos en la Champions, porque con los 27 puntos que vamos a sumar, seguro que nos salvamos. Cada día te renuevas y es lo que tengo que transmitir a los jugadores. Trataremos de que se juegue bien y además se gane jugando al ataque. Como dicen los aficionados del fondo ‘a por ellos’. El futbolista que no tenga fe, por muy bueno que sea, estará fuera de este proyecto. No hay tiempo para que yo diseñe líneas maestras de lo que quiero, así que tendré que ser yo quien se adapte a la plantilla"