Un Zidane Real

Zidane lo sabía y lo había anunciado antes de esta vuelta de Francia al estadio de Saint Denis: "Confío en el público; estará con nosotros". Y así fue, porque Zizou y sus compañeros también estuvieron a la altura de su fama, de este juego y del estilo que les hizo dominar el fútbol mundial durante cuatro años.

Francia está feliz porque en la impresionante victoria frente a Eslovenia (5-0) ha podido disfrutar del mejor Zizou, el Zizou del Real Madrid. Como lo vemos cada fin de semana los que vivimos en España, los franceses también tuvieron la suerte de admirar estos gestos técnicos casi extraterrestres hechos además en una alegría que viene muy bien a la selección gala. No sólo condujo el juego de su equipo, sino que estuvo muy bien en ataque. Encontró un poste y en uno de sus disparos una magnífica mano del portero evitó el gol.

En una selección con ocho futbolistas que juegan en la Liga inglesa, Zizou puso el toque latino que tanto nos gusta. La grada lo pasaba bien y los 80.000 espectadores del Estade de France coreaban su nombre: "Zizou, Zizou". Un solo partido ha bastado para que Francia haga olvidar el desastre del Mundial de Corea y Japón y la inquietud nacida tras los partidos contra Túnez y Chipre. Cuidadín, Cuidadín la gran Francia ha vuelto y su líder se llama Zidane.