Primera | Real Madrid
Valdano recupera a la Quinta del Buitre
Sus miembros entrenarán a los chavales de la cantera por líneas l Butragueño a los delanteros, Míchel y Martín Vázquez a los medios, y Sanchís a los zagueros
La Quinta del Buitre murió, deportivamente hablando, el 24 de mayo del año 2000. Saint Denis. Manuel Sanchís Hontiyuelo levanta al cielo parisino la octava Copa de Europa, la segunda que conquistaba como eslabón redentor de esa generación de jugadores de seda a los que sólo les faltó coronar el Everest del fútbol continental para reivindicarse ante el gran público. Dos años después, el Real Madrid ha sabido calibrar el impacto emocional de los componentes de la Quinta para resucitarlos como espejo didáctico para los más jóvenes.
La iniciativa cabe valorarla, como mínimo, como sumamente original. Jorge Valdano y Alberto Giráldez, responsable máximo de la cantera del club, han ideado una especie de entrenamientos virtuales que permitirán a los críos de los diferentes equipos de las categorías inferiores (alevines, infantiles y juveniles) ejercitarse con los que han sido los ídolos de sus hermanos mayores y, en algunos casos, de sus padres.
Para entendernos, la cuestión radica en que se programarán a partir de septiembre entrenamientos específicos por líneas, con los que se busca un incentivo y un plus de motivación para los canteranos con el fin de incrementar su grado de compromiso y, por supuesto, con la seguridad de que ex futbolistas de semejante talento les podrán enseñar a los niños gestos técnicos y trucos que ni siquiera los cualificados técnicos de la casa pueden manejar.
Lionel
Pongamos un ejemplo práctico. Para Lionel, ese camerunés de 12 años que juega en el Infantil A deleitando con su vigoroso físico y su insaciable olfato de gol, va a suponer un estímulo incontrolable compartir con Butragueño lecciones sobre el césped de cómo hay que parar la pelota, jugar al engaño, amagar, fintar y rematar a gol.
Será como una escuela taurina en la que, aparte del Buitre, los primeros espadas serán Míchel y Martín Vázquez, para colaborar con el aprendizaje de los centrocampistas, y Sanchís y Chendo (delegado del primer equipo) impartiendo clases de cómo hacer la defensa de anticipación y buscar el cruce sin caer en faltas al borde del área. Los héroes de la Quinta serán los profesores de las caras del futuro. Buena idea.