El Barça se mete en la puja por Vieira

Todos daban por hecho que el Real Madrid era el único club que pujaba en serio para hacerse a partir de la próxima temporada con los servicios de Patrick Vieira, el flamante escudero de Zidane en la selección fracesa y uno de los baluartes del Arsenal.

Pero el Barcelona, sumido en una crisis de talentos que le ha llevado a quedar apeado prematuramente de la Copa del Rey y a estancarse tras la pasada jornada del Campeonato de Liga, ha decidido meterse en la puja con tal de terminar con esa racha de megafichajes (Figo, Zidane...) que tan buenos réditos le está dando a su eterno enemigo.

Según pudo saber AS, Joan Gaspart ha mantenido varias conversaciones con el vicepresidente del club londinense, David Dein, en la que le ha dejado claro dos cosas: 1) Vieira se convierte en un objetivo prioritario del club azulgrana para las próximas cinco temporadas; y 2) Arsene Wenger, técnico francés del Arsenal, es el candidato número uno elegido para que ocupe el banquillo azulgrana a partir del próximo 1 de julio.

El Real Madrid no está dispuesto a retirarse de la puja dado que considera que Vieira sería el refuerzo ideal para su centro del campo, pero la insistencia del Barcelona y su intención de utilizar el fichaje de Wenger como reclamo emocional para Vieira (compatriotas, al fin y al cabo) dificultan el deseo de Valdano y Del Bosque de dar continente y contenido al eje de la medular del Real Madrid en torno al gigante de ébano francés.

Marc Roger, agente de Vieira, es también, curiosamente, el representante de Wenger, con lo que entre los dos franceses anda el juego y parecen tener claro que quieren seguir la próxima temporada viajando en la misma nave. Vieira, que tenía pensado declararse en rebeldía como hizo en su día Zidane para acelerar su traspaso al Madrid, ha decidido no abrir la boca y esperar acontecimientos.

Eso juega a favor del Barça, dado que Florentino Pérez tiene claro que jamás iniciará un pleito con el Barcelona con el fichaje de un futbolista, y menos por un jugador como Vieira que, a pesar de su indiscutible jerarquía como centrocampista, carece del caché de Figo o Zidane. El Arsenal pide 12.000 millones. Ni pensarlo.