Pekín despedirá a una leyenda: Shaun White anuncia su retirada
En rueda de prensa, el snowboarder estadounidense asegura que estos serán sus últimos Juegos Olímpicos. En su palmarés, tres oros y la perfección.
No es su primer adiós, pero sí el definitivo. Y no uno cualquiera. Shaun White, a sus 35 años, ha anunciado su retirada tras los Juegos Olímpicos de Invierno. Pekín, con ello, despedirá a una leyenda del deporte que ha ido mucho más allá. Una de esas figuras que trascienden y dejan huella en la sociedad siendo algo más que un ídolo deportivo. El snowboarder, también skater, está disputando sus quintos Juegos. En la cita olímpica, en total, ha cosechado tres oros. El primero, con 19 años, se lo apuntó en Turín (2006). Los restantes, en Vancouver (2010) y PyeongChang (2018). En la actual edición, siendo el componente más veterano del equipo estadounidense de su disciplina, sin ser favorito pero con mucho que decir, competirá en halfpipe.
"Son mis últimos Juegos Olímpicos. Todo tiene emoción extra. Es la última vez que haré esto (una rueda de prensa previa a competir), la última vez que me sentaré con vosotros (sus compañeros de equipo), la última ceremonia de inauguración... es bastante, bastante duro, pero lo estoy disfrutando", ha explicado, visiblemente emocionado, al confirmar un rumor que ya había cogido mucha fuerza. Por todo ello, pues, buscará el mejor cierre posible. El enésimo éxito de ese palmarés que da forma a su leyenda. Más allá de sus preseas en olimpiadas, White también ha escrito historia. Y de qué manera. Posee 18 medallas en los Winter X-Games, incluidas 13 de oro, y otros cinco máximos estandartes en los X-Games de verano, encima del skate. Fue el primer deportista en competir y tocar metal en ambas ediciones y, además, en 2012 alcanzó la perfección, con una puntuación de 100 sobre 100. Pionero e insuperable.
Como en casi toda trayectoria exitosa, The Flying Tomato, como se apoda, también acumula dosis y dosis de sacrifico. Sin ir más lejos, llegar a Pekín ha supuesto un esfuerzo inmenso para su cuerpo. "Lo he estado dando todo. Ha habido altibajos para llegar, pero a través de todo me he vuelto más fuerte y mejor en todo el camino y estoy emocionado de estar aquí", ha explicado. Los problemas de rodilla, que le llevaron a iniciar una parada de tres años en 2018, han sido su principal freno. Un obstáculo más de tantos superados. Antes de cumplir su primer año de vida, fue operado dos veces a corazón abierto para corregir una cardiopatía congénita. Otras victorias que no resuenan en su currículum, pero que pesan tanto o más que este. Uno que, por otro lado, le ha llevado a ser el protagonista de un videojuego. Su carrera ha estado muy lejos de la realidad común.