España se da un respiro
La Selección masculina derrotó a Kazajistan en un partido plácido, sigue invicta y pone un ojo en el Grupo A, en el que Italia, campeona mundial, va cuarta.
La Selección masculina de waterpolo cuenta sus partidos por victorias. Tres de tres para los de David Martín, que son líderes destacados del Grupo B y con un triunfo más, ante Australia o Croacia, se asegurarían prácticamente la primera posición. Ser primero es la mejor de las noticias, aunque siempre hay que poner un ojo a lo que ocurre en el otro grupo. Serbia jugó al gato y al ratón en Río 2016 y acabó con el oro al cuello. Italia, a falta de su tercer partido, es la cuarta del Grupo A. Y es la actual campeona mundial.
Antes de que llegue esa última jornada de quinielas, España se dio un respiro ante Kazajistán después de dos batallas frente a Serbia y Montenegro. La selección asiática es una de las más débiles de los Juegos, y así se pudo ver desde el primer minuto. Jugadores como Felipe Perrone apenas participaron o Dani López Pinedo dejó el testigo de la portería a Unai Aguirre, de 19 años, que se estrenó con un 81% de paradas.
Dos goles de Granados y otro de Munarriz pusieron el 3-0 en el primer parcial. La Selección se propuso defender con intensidad máxima, blindar la meta de Unai Aguirre. Y lo logró también en el segundo parcial, que puso un 6-0 con tantos de Granados y de Sanahuja. El partido estaba sentenciado.
La mini reacción de Kazajistán y la último arreón español
Hasta el minuto 20 de partido Markovic no anotó para Kazajistán. El marcador ya era de 8-1 con los goles de Bustos y Mallarach. Marcó Fran Fernández, De Toro y de nuevo el joven Sanahuja. Un 11-2 a falta del último cuarto que permitió que algunos jugadores, como Felipe Perrone, apenas participarán. Kazajistán se estiró hasta el 11-4, pero España marcó cinco goles seguidos en los últimos cuatro minutos.
Fernández, Tahull, Mallarach, Granados y Sanahuja completaron la goleada, que mantiene a los de Martín como el mejor equipo hasta el momento en Tokio. La primera fase está encarrilada a falta de saber la posición final y de conocer ese rival de cuartos de final que, en los últimos cinco Juegos ha supuesto un muro.