Mireia resurge y se mete cuarta en la final de los 400 estilos
La badalonesa completó su mejor prueba en los últimos años y sus 4:35.88 le valen para pelear por la que sería su quinta medalla olímpica este domingo (4:12).
Apenas 17 nadadoras en los 400 estilos, una prueba salvaje, que Mireia Belmonte conoce al dedillo porque la lleva nadando desde que tenía 16 años y logró el oro en el Mundial de júnior en Río de Janeiro. En un ciclo olímpico discreto, en una temporada con dos lesiones que le han impedido prepaparse junto a su entrenador, la badalonesa ha completado en las semifinales unos 400 estilos a su mejor nivel, con un 4:35.88 que le meten cuarto en la final de este domingo (4:12 hora española). En un escenario olímpico, Mireia se agiganta.
Por la calle tres, junto a Katinka Hosszu, la nadadora de la UCAM empezó discreta en la mariposa con 1:03.20. No estaba lejos de la cabeza, ni mucho menos de la húngara, quien no demostró ser aquella nadadora dominadora de años anteriores. Más humana, como Mireia, ambas fueron de la mano, a rebufo de la americana Weyant y la australiana Wilmott, quienes quedaron primera y segunda de la final con 4:33.55 y 4:35.28.
Mireia Belmonte se permitió el lujo de sprintarle a Hosszu y ganarle un puesto, señal de que, pese a sus problemas, en este último mes se ha preparado a conciencia en Sierra Nevada. Mireia marcó 4:35.88 por 4:36.01 de Iron Lady. "He disfrutado mucho, también he sufrido, pero ha sido un gran comienzo", comento la badalonesa, que perseguirá su quinta medalla olímpica en los Juegos Olímpicos con la que pretende igualar a David Cal.
La renuncia de la australiana Kaylee McKweon, quien poseía la mejor marca mundial del año, es otro punto a favor de Mireia, que para conseguir su objetivo en la final deberá mejorar la marca. Aún le quedan los 800 y 1.500 libre, pruebas en las que la final y las medallas están más marcas. Pero la Mireia de Tokio ha demostrado ser la mejor de los últimos cuatro años.