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BAYER LEVERKUSEN

Fernando Carro: “Xabi Alonso seguirá con nosotros el próximo año”

El CEO del Bayer Leverkusen atiende a AS en la víspera de la ida de semifinales de la Europa League. Defiende que “la historia le debe un título” a su club y elogia al técnico español.

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Fernando Carro: “Xabi Alonso seguirá con nosotros el próximo año”
Jörg SchülerJörg Schüler/Bayer 04 Leverkus

Fernando Carro (58 años, Barcelona) es el CEO del Bayer Leverkusen desde 2018. Hace meses el club fichó a Xabi Alonso y el equipo pasó de estar en descenso a alcanzar puestos europeos. Este jueves su equipo se enfrenta en las semifinales de la Europa League contra la Roma de Mourinho. En la víspera del partido de ida atiende a AS…

¿Qué le ha aportado Fernando Carro al Bayer?

El fútbol cada vez se está profesionalizando más. Cada vez hacen falta más directivos y personas con un fuerte liderazgo, con experiencia en grandes organizaciones. Además, con el aumento de los ingresos por televisión en las grandes Ligas, no solamente han subido mucho los sueldos de los jugadores, sino también ha subido mucho el número de personas que trabajan en un club de fútbol, que es una pequeña o mediana empresa. Por eso hacen falta, no solamente personas que llevan muchos años en el mundo del fútbol y han ido subiendo orgánicamente con la organización, sino también refuerzos de personas con una experiencia quizás diferente y que aporten ideas nuevas a la organización. De ahí que, a nivel de organización, a nivel de liderazgo, a nivel de profesionalización hemos aportado muchas cosas. Yo creo que eso ha sido muy importante para mejorar la parte deportiva y la parte no deportiva.

¿Qué objetivo tiene como CEO del Bayer?

Nuestros objetivos y los del accionista y dueño, que es la empresa farmacéutica Bayer, siempre han sido los mismos. En los últimos 20 años, casi todos hemos jugado competiciones internacionales. Lo ideal sería que cada año jugáramos en la Champions. Eso quiere decir estar entre los cuatro mejores de Alemania, y en el ranking de la UEFA, estar entre los top 20. Lo que nos falta históricamente es algún título, porque ganamos el título de la UEFA en 1988, ganamos la Copa en 1993, pero llevamos desde entonces sin lograr ninguno. Hemos quedado cinco veces segundos en la Liga. En el año 2002 quedamos finalistas de la Copa de Alemania, finalistas de la Champions y segundos de la Liga. Con lo cual, aparte de clasificarnos entre los cuatro primeros cada año, yo lo cambio por un título. Al final los títulos son muy relevantes para la imagen de un club. Sea el título de Copa, sea el título de la Europa League o de campeón de Alemania.

El Bayer ha sido cinco veces subcampeón de la Liga pero no la ha ganado nunca. ¿Qué les ha faltado para lograrlo?

Siempre digo que, igual que al Atlético de Madrid la historia le debe una Champions, porque me acuerdo desde el 74 con el Bayern de Múnich, el gol Schwarzenbeck, la repetición de la final, o el gol de Sergio Ramos en el minuto 93, en Lisboa, o los penaltis de Milán, la historia le debe al Bayern Leverkusen un campeonato alemán. En el año 2002 llevábamos tres puntos de ventaja al Bayern, antes del último partido. Hubo un gol en propia puerta de Ballack, y por la diferencia de goles no fuimos primeros de la Bundesliga, pero el Bayer fue un equipo impresionante entre 2000 y 2002. Esos años sí que era un equipo a un nivel top, top, top... Y que entonces no se ganase ningún título, pues es una pena y sinceramente creo que es un ejemplo de la influencia del factor suerte. Pero bueno, aunque con el paso de los años se ha ido haciendo más difícil, vamos a seguir trabajando para cumplir ese sueño algún día.

Ese periodo de 2000 a 2002 fue una época de esplendor del Bayer. ¿Cómo está ahora mismo el club?

Tenemos que ser conscientes de que a nivel de recursos no estamos a la altura de los top 10 o 12 de Europa, que tienen unos ingresos entre quinientos y mil millones. Los primeros de la Premier League, Barça, Real Madrid, Atlético, Juventus, PSG… Hay clubes que tienen muchísimos más recursos que nosotros. Lo que hemos intentado hacer con nuestros recursos es estar entre los mejores de Alemania. A nivel de recursos estamos por detrás del Borussia Dortmund, del Bayern de Múnich y también del Leipzig, y luego estamos ahí algunos equipos alemanes parecidos. No obstante, nosotros intentamos estar cerca del Leipzig y del Dortmund. Eso significa quedar entre los cuatro mejores de Alemania. El objetivo es conseguirlo regularmente. Y para eso tenemos que ser mejores que el resto a la hora de manejar los recursos, traer jugadores jóvenes que despuntan con nosotros, tener una buena política de traspasos, una buena política de futbol base, contar siempre con el mejor entrenador que podamos tener, etc. Se trata de intentar ser mejor que los demás, aunque los recursos no sean tan buenos como los de ellos.

¿Nota una gran diferencia entre el mundo empresarial y el mundo del fútbol?

Hay cosas que son iguales que en el mundo empresarial a nivel de conseguir objetivos, de tener una estrategia a largo plazo, de tener un liderazgo, de crear equipos, de trabajar conjuntamente… Pero realmente lo que es distinto es que la influencia tuya en el fútbol a veces es una influencia indirecta. Porque en el hecho de que alguien meta un penalti o no lo meta, o se aproveche una oportunidad de gol ahí tienes una influencia limitada. Y luego, por supuesto, la gran repercusión mediática. En cualquier otra actividad no la hay. Cualquier pequeña cosa que hagas en el fútbol tiene una gran respuesta mediática. Quizás por eso hace falta que en algunos casos como en España, exista un control financiero mayor que en otros países. Al final se te mide más por resultados deportivos que por manejar los recursos que tengas de manera eficiente y casi sin perder dinero. Eso lo hace muy difícil, porque siempre estás tentado a gastar más de lo que tienes para intentar conseguir resultados deportivos que no siempre van a llegar. Ahí hay un riesgo de endeudarte y de entrar en una espiral negativa. Hay suficientes ejemplos, también en Alemania, precisamente entre clubes de toda la vida.

Precisamente, el trabajo que usted está haciendo en el Bayer le ha llevado también a ser noticia aquí en España por el presunto interés del Barça en ficharle. ¿Qué hay que cierto en eso?

He leído lo mismo que vosotros. Conmigo no ha hablado nadie, pero tengo que decir que yo soy CEO. O sea, soy aquí el máximo directivo, que abarca todo, desde el deporte al resto. Con lo cual no soy un director deportivo al uso o un director de fútbol, que es lo que dicen que busca el Barça para sustituir a Mateu Alemany. Yo no tengo interés en esa posición ni me veo en esa posición. Estoy contento donde estoy y aún nos quedan muchas cosas por hacer aquí en Leverkusen.

“¿El Barça? Conmigo no ha hablado nadie, pero estoy contento donde estoy”

Fernando Carro

Estamos en vísperas de las semifinales de la Europa League. ¿Cómo llega el Bayer a esa eliminatoria contra la Roma?

Con Xabi Alonso hemos logrado una muy buena evolución, con una seguridad, un control y una manera de jugar que nos ha proporcionado una buena racha en estos primeros meses del año. Ha llevado al equipo a tener más control, más cabeza, a ser defensivamente mejor y aprovechar nuestras armas y fortalezas. Nos veo llegando en un buen momento de forma y muy ilusionados, muy seguros de nosotros mismos y dispuestos a luchar a tope para conseguir la clasificación para la final.

¿A quién ve favorito?

Yo creo que está 50 a 50.

¿Que Xabi conozca a Mourinho le puede dar cierta ventaja al Bayer?

No lo sé. Xabi es un entrenador muy inteligente, que, además de conocer a Mourinho, sabe leer muy bien al rival y preparar muy bien los partidos. Obviamente, conocer a Mourinho no es una desventaja. Aunque Mourinho también ha visto cómo jugamos y conoce muy bien a Xabi. Tampoco creo que se lleve muchas sorpresas.

¿Por qué llega un día y el Bayer se decide a fichar a Xabi Alonso para darle responsabilidad de sacar al equipo de una crisis de resultados?

Una responsabilidad que tenemos como directivos del club es indudablemente ver y observar a entrenadores, no solamente cuando te hace falta, sino en otros momentos. A Xabi Alonso lo llevábamos siguiendo hace tiempo, lo teníamos en nuestra lista de posibles entrenadores futuros para el momento que creyéramos conveniente. Al no conseguir remontar con Gerardo Seoane, que estaba haciendo un gran trabajo y con el que habíamos quedado terceros el año pasado, pues decidimos ir a por Xabi. Necesitábamos un nuevo impulso y para eso contábamos con una lista de varios entrenadores. Teníamos muy buenas referencias de Xabi. Hablamos con él y en las conversaciones nos dimos cuenta de que realmente tenía muy claras sus ideas, tenía unas capacidades y otras virtudes muy importantes, una experiencia muy importante en el mundo del fútbol. La suma de sus virtudes, de su experiencia en diferentes ligas y de haber haber aprendido de muchos entrenadores, nos hacía estar seguros de que era una apuesta muy buena para el futuro y por eso nos decidimos a dar el paso.

Xabi cogió al Bayer en puestos de descenso y lo ha aupado a la zona europea…

Creo que Xabi le ha dado la vuelta a la situación en el sentido de que ha devuelto la confianza a los jugadores subrayando virtudes como la concentración, la disciplina y la capacidad de lucha. Y luego le ha enseñado al equipo a controlar un poco más el juego, se ha basado mucho más en una estabilidad defensiva, un control del partido, un control del juego, jugar con más cabeza, menos emoción, pero más sacar las fortalezas que tenemos. Su experiencia en los entrenamientos demuestra que lo que él espera de sus jugadores lo puede hacer él mismo. Eso es muy importante y yo creo que ha aportado también muchísima experiencia. Los jugadores le escuchan, le hacen caso, se los ha ganado, y eso para un entrenador es muy importante.

A Xabi se le relaciona con el Madrid, pero ya ha dicho que va a seguir en el Bayer. ¿Qué supone para ustedes que haya confirmado su continuidad?

Tiene contrato con nosotros hasta 2024. Él está contento aquí y nosotros estamos contentos con él. Estamos disfrutando de trabajar juntos y estoy seguro de que estaremos con él la temporada que viene. Y ojalá sean muchas más, pero en el fútbol no se puede mirar mucho más allá.

Una de las victorias más sonadas ha sido sobre el Bayern. ¿Qué supone en Alemania derrotar al gran ogro alemán?

Ayuda un poco en el sentido del prestigio y la imagen, pero al final esta victoria son solo tres puntos, aunque nos alegramos mucho de haberlos conseguido.

¿Usted tienen capacidad para romper algún día la hegemonía del Bayern?

Ya te dije que me gustaría ganar una Bundesliga y romper la hegemonía del Bayern de Múnich, pero hay que tener en cuenta que nuestros recursos, con un estadio de 30.000 personas, con una ciudad de 160.000 habitantes, no son comparables a los recursos que tiene el Bayern de Múnich. Creo que en el fútbol es más difícil romper la hegemonía en una liga en un año entero que ganar una Copa, una Europa League o una Champions. Hay que aprovechar un momento de debilidad del Bayern. Por eso me da mucha rabia que este año, en el que el Bayern ha tenido problemas, no hayamos estado al 100% desde el principio.

¿Cómo ve el duelo Bayern-Dortmund esta temporada?

Quedan partidos aún. El pasado domingo, el Dortmund ganó 6-0 al Wolfsburgo. Yo veo un poco mejor al Dortmund, pero pienso que va a ganar el Bayern, porque creo que ya no se va a dejar sorprender, aunque quién sabe…

¿Hay muchas diferencias entre la Bundesliga y la Liga española?

LaLiga se vende mejor al extranjero que la Bundesliga, principalmente porque genera más ingresos internacionales que nosotros. Por otro lado, la Bundesliga es mejor en tener precios más asequibles, tener más cercanía con los aficionados. Además, en Alemania no hay enfrentamientos entre los clubes grandes y el resto de la liga. Hay más unidad y más sentido de consenso, que es una virtud alemana. En Alemania en general hay más capacidad de consenso, más capacidad de estar todos juntos y eso nos distingue. Creo que esas son las diferencias más importantes. Luego hay otras. Por ejemplo, nosotros no tenemos el control financiero que tiene España porque tampoco se necesita. En Alemania no hay tanta mentalidad de gastar más de lo que uno tiene. Y a lo mejor pues se trabaja un poco distinto. El fútbol que se hace en Alemania tiene más intensidad. Cualquiera puede ganar a cualquiera y hay más equipos que pueden llegar a Europa. Hay un poco más de igualdad en la zona media. Pero bueno, son pequeñas diferencias.

Y en cambio, la mayoría de los clubes españoles casi no tienen recursos para acudir al mercado…

Seguramente, porque se han gastado más dinero del que tenían y también porque pagan más y no les importa tirar la casa por la ventana y hacer contratos con salarios muy altos. Aquí nosotros tenemos un sistema de mucho salario variable dependiendo de si juegas y de los puntos que consigas. Así que ingresas más dinero según resultados. Cuanto mejor va el equipo más cobras, pero si no consigues puntos, no ganas tanto. No pagas a todos, aunque no jueguen o estén lesionados. Aquí cuando uno está lesionado más de seis semanas, tiene que tener un seguro privado para pagárselo él. En Alemania el sentido común está muy arraigado y muy presente.

“En Alemania cuando uno está lesionado más de seis semanas, tiene que tener un seguro privado”

Fernando Carro

En España hay mucho debate sobre facilitar la entrada de inversores. En Alemania tienen la regla del 50+1…

Personalmente, estoy en contra de esta regla del 50+1 porque me parece absurda. La regla es que hay clubes que siguen siendo clubes deportivos. Pero si un club deportivo pone su parte de fútbol profesional en una sociedad anónima, entonces los socios deben mantener, por lo menos, el 51% de los votos en las decisiones. Los socios y los seguidores deben tener el control del club. Por eso la mayoría de clubes no tiene accionistas externos. Al contrario que en España, donde la totalidad, salvo tres excepciones, son SAD. En Alemania las excepciones son Bayer, Wolfsburgo y Hoffenheim, porque son inversores que llevan más de 20 años siendo los dueños del club. De hecho, el Leverkusen nació de los empleados de la empresa. Personalmente, creo que está bien que haya normas, pero no creo que sea necesario construir una norma tan férrea como la 50+1. Lo que tienes que tener controlado como club es que no lleguen personas que no posean las competencias y un interés profundo en el club y que no lo dejen mal. Yo creo que eso se podría solucionar con una norma diferente a la del 50+1.

¿Cómo ve la regla del límite salarial que hay en España?

Yo soy muy liberal. Lo que se pueda, no hay que reglamentarlo. A mí me parece que la reglamentación en España es exageradamente estricta. Yo seguramente sería más liberal.

¿El Caso Negreira está perjudicando a nivel imagen en el extranjero?

Aquí se habla poco del tema a nivel calle. Dentro del mundo del fútbol sí se habla, pero yo creo que le hace más daño al Barcelona que al fútbol español. Se ve un tema muy específico del Barcelona.

¿En Alemania también se le critica a los árbitros y al VAR?

En todos los lados hay críticas con los árbitros. Nosotros tuvimos ahora a Mateu Lahoz, que nos arbitró en Saint Gilloise, e hizo un arbitraje espléndido. No sé cómo a Mateu Lahoz, con la calidad que tiene, no le dejan seguir arbitrando. Yo creo que ha sido, junto con un portugués en Budapest, el mejor árbitro que hemos tenido en Europa League o la Champions. En Alemania se puede hablar más con los árbitros después de los partidos. Me gusta más la actitud alemana de poder hablar con los árbitros.

¿Qué planes tienen con Florian Wirtz?

De momento se va a quedar con nosotros. Él sabe lo que tiene aquí y lo importantes que somos para él y para su desarrollo. Hay interés de varios equipos, pero saben que no vendemos.

¿Ve a Bellingham capacitado para triunfar en el Real Madrid?

Eso la verdad es que no lo puedo valorar. Personalmente, como aficionado del fútbol, me gusta verle jugar. Tiene nivel para jugar en cualquier equipo y cualquier liga. Es muy bueno.

¿Le sorprende el rendimiento de Haaland en el Manchester City?

Ha tenido una adaptación rápida en todos los países. Es una máquina, impresionante. La pena es que no lo hayamos podido disfrutar más tiempo en Alemania.