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ATLÉTICO

Un mercado para el Atleti con salidas... Y altas ‘low cost’

La próxima ventana que se abre en enero provocará movimientos en el equipo golpeado por la eliminación europea: habrá salidas y fichajes ‘low cost’.

Actualizado a
Miguel Ángel Gil Marín y Simeone en una imagen en la estadía en Los Ángeles de San Rafael en 2019. El equipo en el próximo enero tendrá bajas y también altas, sobre todo en la defensa.
JESUS ALVAREZ ORIHUELADiarioAS

El Atlético se abrazó a este parón por el Mundial con la necesidad imperiosa de respirar, sacar la cabeza, tiempo para sanar heridas. Porque fueron muchos los golpes de la primera parte de esta temporada partida en dos por Qatar. La eliminación de la Champions primero y de la consolación de la Europa League después, además, desangra en lo económico. En las cuentas de la temporada ya ha un agujero: los 9,6 millones que el club rojiblanco hubiera percibido por alcanzar los octavos que ya nunca llegarán. Estaban presupuestados. En el invierno pasado la advertencia ya fue por ahí. “O el equipo se clasifica entre los cuatro primeros, Champions, o deberá hacer ventas”. Y ventas dolorosas. Ventas de estrellas. Léase Carrasco, por ejemplo. Jugadores importantes. Aquello se logró y aquel golpe se paró pero el de este otoño no. El Atleti afronta enero mirando las cuentas y obligado, casi, a cuadrar con ventas. Pero sin dejar de peinar el mercado. Porque también son necesarias altas. Low cost, vale, pero altas.

Desde el verano de 2021 el Atlético necesita reforzar su defensa. El equipo había ganado en mayo LaLiga con Simeone agarrado a un cambio de sistema, el 3-5-2 y solo cuatro centrales en su plantilla. Necesitaba otro al menos. Una necesidad agravada cuando la 21-22 comenzó con las lesiones recurrentes de Savic y Giménez, su pareja titular: cada uno se perdió un tercio de la temporada, hasta el 2 de octubre de 2021 no les pudo reunir. Y, mientras, Felipe y Hermoso salían en todas las fotos. Rojas, errores, partidos que se van. El primero porque lejos, muy lejos, queda aquel Felipe que llegó en 2019 y se hizo un sitio con su contundencia aérea. El segundo porque es una ruleta rusa. Tan pronto te hace el gol de la victoria en el último minuto como que un penalti en la jugada siguiente.

El verano llegó, sin embargo, sin central. El fichaje del Atlético en la línea fue la renovación de un Felipe que terminaba contrato en junio y luego ya no, se le renovó por una cláusula de partidos jugados en su contrato. Pero sigue en el mismo lugar. Sin Savic y/o Giménez el equipo se descompone atrás. Y si el charrúa vive en constante peligro de lesión, el montenegrino vive ahora mismo su peor versión. Necesita el Atlético un central líder, que mande y que organice. La foto es Reinildo, que llegó el pasado enero a LaLiga siendo un desconocido (aunque en Francia no lo era, incluido en el XI Ideal de L’Equipe de la 2020-21 en la que el Lille, su equipo, se proclamó campeón en Francia por delante del PSG de Mbappé y Neymar) y que cumple a la perfección su papel de cerrojo, siempre fiable y perfecto al corte, aunque con carencias en la salida de balón y en los últimos partidos contagiado del gris general del que solo se salvan Oblak, Griezmann y João Félix. La competencia de Reguilón le vendrá bien tras el parón.

Pero el Atleti necesita no solo competencia entre los futbolistas que están. Se busca un central de garantías y a buen precio, en un mercado difícil como es el de enero pero condicionado por una variante hasta ahora no conocida: la de un Mundial en invierno. Uno de los centrales que a Simeone le gustan es Piero Hincapié, ecuatoriano de 20 años que juega en el Leverkusen. Con contrato hasta 2026 la intención del club alemán es venderle después de Qatar. Pero una buena actuación dispararía su precio y esa es una línea que el club rojiblanco no puede pasar. El bueno, bonito... y barato, sobre todo barato, es la norma después de la de “Dejen salir antes de entrar”.

El lateral derecho es otra posición coja. Con el fichaje de Nahuel Molina, de momento, fallido. Apuesta del Cholo, fue una operación complicada en verano por su alto coste, de 20 millones, el más caro de todos. Una operación abaratada a 12 por el traspaso al Udinese, su club de procedencia, de Nehuén Pérez, central argentino que no enraizó con el Cholo: no llegó a debutar y vivió continuas cesiones desde su llegada a Madrid en 2019. Pero, lo escrito, de momento es otro futbolista que sale siempre en las peores fotos. Nervioso y errático, arrastra sus errores ante el Villarreal (un gol regalado y una roja) en su debut en el Metropolitano (2ª jornada de Liga) como una penitencia. Pero es el único lateral derecho puro de la plantilla. El único rojiblanco sin sustituto más allá del parche Llorente. Wass que fue fichado para ello tras la marcha el enero pasado de Trippier regresó este verano a su tierra (el Brondby danés) empujado por un problema personal. Reforzar esa posición urge. Se está convirtiendo en agujero en sí mismo. Esa espalda de Nahuel.

“Dejen salir”: João, Cunha, Carrasco, Felipe, Lemar...

En el “dejen salir” varios candidatos. João Félix por su relación rota con el Cholo. Cunha por su falta de minutos y el golpe particular de quedarse fuera de la lista de Brasil en el Mundial de Qatar. Felipe. Carrasco. Y hasta un Lemar que cuando juega es decisorio pero juega poco también perseguido por las lesiones que le impiden encadenar seis partidos seguidos desde hace dos temporadas. “Para entrar” ese lateral derecho, ese central y un mediocentro con nombre propio: Aleix García del Girona.