Un Espanyol vendedor en un mercado low cost
Los blanquiazules, obligados a ingresar 15 millones en verano, planean otro mercado de mínimos con jugadores libres o de ligas menores
Faltan todavía once partidos para finalizar la competición, pero como es evidente en los despachos del Espanyol ya trabajan en la próxima temporada. Con unas limitaciones económicas inmensas, como es por todos sabido, y con una incertidumbre que lo marca todo: la categoría en la que jugará el Espanyol la próxima campaña. No es lo mismo Primera que Segunda, pero las líneas maestras del mercado serán las mismas: toca vender y acertar con jugadores libres.
El primer paso del mercado, o el más importante, son las ventas. El Espanyol está obligado a vender por un valor de 15 millones, pues es lo que está presupuestado para esta campaña. Todo apunta a una venta de Joan pese al farol de Garagarza hace unas semanas, ya que el portero está en la agenda de media Europa y siendo honestos su nivel es más alto que el del Espanyol. Si el equipo se queda en Primera su cláusula es de 30 millones, a menos que debute con España que ascendería cinco millones más, pero en Segunda es de 15. Con su venta, pues, el Espanyol cubriría lo presupuestado y seguramente ingresaría algo más. Luego está Omar, cuyo valor es ya de 10 millones y siempre ha manifestado querer quedarse en el club, aunque ya levanta el interés también de grandes clubes. Con la marcha de alguno de ellos, más los 13 jugadores que acaban contrato o cesión, Garagarza está obligado a remodelar medio equipo.
Las líneas maestras del proyecto son claras y vienen marcadas por las limitaciones económicas: firmar jugadores libres y potenciar el talento local. La primera es por obligación, la segunda por convicción. Garagarza quiere ‘catalanizar’ el equipo, consciente de que jugadores de la casa, comprometidos con el club, pueden ofrecer mejor rendimiento que algunos fichajes de sus mismas características. El club tiene ya a varios chicos con proyección de primer equipo (como Antoniu o Bauza) que serán muchos más si desgraciadamente el equipo desciende. Si se mantiene en Primera tocará fichar.
Aquí hay dos escenarios principales. El primero, tratar de que alguno de los jugadores que está actualmente cedido continúe en la plantilla. El candidato número uno es Kral, el segundo Kumbulla. El fichaje del checo es viable mientras que en el caso del central se tendría que optar por otra cesión ya que hacerse con sus servicios de forma permanente está fuera del alcance del Espanyol. El segundo, firmar jugadores libres. Y no jugadores consagrados o con muchos pretendientes, sino futbolistas que entren dentro de los parámetros económicos que maneja la entidad. En ese sentido han aparecido ya algunos nombres, adelantados por Relevo, como Marcos Fernández (Betis B) o Miguel Rubio (Granada). Jugadores sin experiencia en Primera, como Pablo Ramón, en una apuesta arriesgada pero que sin embargo es la úinica posible.
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