Roberto rescinde y deja Zorrilla
El cancerbero acuerda su marcha del Real Valladolid, donde no contaba pese a tener contrato por un año más.
El Real Valladolid ha acordado con Roberto Jiménez la rescisión de contrato del cancerbero, a quien le quedaba un año más de contrato, si bien desde el principio del verano no contaba. El cancerbero se marcha de Zorrilla después de dos cursos de sensaciones encontradas, en los que jugó de manera intermitente, bajó a Segunda y fue parte del conjunto que volvió a Primera. En total disputó casi 40 partidos, en los que nunca acabó de destacar.
Igual que antaño Manucho a su llegada debió decir que quería marcar 40 goles con el Pucela (algo que se achaca a veces a un error de traducción), el arquero madrileño arribó deseando llegar a los 400 entorchados en la élite, como manifestó en su presentación. Esa primera temporada de blanquivioleta, la 2020-21, apareció pronto en el once, en la segunda jornada, aunque Masip, el predilecto de Sergio González, en cuanto estuvo recuperado, le quitó el sitio.
En una suerte de alternancia extraña, debido a que el Real Valladolid no carburaba con ninguno de los dos debajo de los palos, tuvo varias apariciones más, una racha de cuatro envites y tres turnándose con el hoy capitán, a quien no llegó a mejorar por más que cogiera peso en el vestuario. El postrero descenso llevó a un verano de reflexión en el que pudo y quiso salir, por lo menos en un primer momento, ya que posteriormente prefirió seguir en el José Zorrilla.
“Con el final de una temporada bastante dura a nivel personal y de club, sí contemplaba una posibilidad, quizás centrándome más en estar cerca de mi familia”, confirmó hace casi doce meses, en una comparecencia en la que también aseveró que en ese instante no pensaba salir. Eso alteró los planes de la dirección deportiva, que habría preferido una portería cubierta por Masip y Caro, condenado a salir por esa puerta cerrada de quien antes la entreabrió.
Con todo, fue el primer titular de Pacheta, que confió en él durante las primeras 19 jornadas, en las que, como había pasado el curso anterior, encajó más de un gol por encuentro. De más a menos, tuvo en el inicio alguna actuación en la que resultó salvador, aunque perdió el sitio después de varias de menos nivel. Y a partir de su suplencia, dimitió; volvió a jugar en Copa, pero ni en esos momentos ni en los entrenamientos apretó en demasía a Masip.
Habida cuenta del claro objetivo de reforzar la portería, algo que sucedió pronto con Sergio Asenjo, no tenía sitio desde el principio del verano, como se percibió en los amistosos, que no disputó. Sin embargo, su contrato (importante para su estatus actual) y la falta de ofertas que se aproximaran a este demoraron su salida hasta este viernes, cuando el club ha dejado resuelta una de las situaciones de mayor interés en el capítulo de bajas para este curso, teniendo que compensar, a la fuerza, parte de ese contrato.