Gabri Veiga es el gran beneficiado del caso Denis
La guerra abierta entre Carlos Mouriño y Denis Suárez, iniciada en verano de 2021, ha tenido un principal ganador: Gabri Veiga. El porriñés ha ocupado el sitio vacante del salcedense, vetado por el presidente por formar parte de la agencia de representación que llevó a Bugarín al Real Madrid. Curiosamente, es la misma agencia que representa a Gabri Veiga, que tuvo que poner a su hermana como intermediaria para firmar una renovación del contrato.
De hecho, el propio Veiga también fue una víctima colateral del caso Denis durante casi toda la temporada pasada, pues el club le impedía ejercitarse con el primer equipo hasta que no se produjese una ampliación de contrato, la cual debía ser negociada por una persona ajena a la agencia de representación implicada en el caso Bugarín (Intermedia Sport Player). El joven canterano cedió ante las pretensiones celestes, por lo que el acuerdo se cerró rápidamente y el mediapunta regresó enseguida a la primera plantilla.
Si Denis le cerró el paso en la anterior temporada, esta campaña el puesto vacante estaba destinado para Óscar Rodríguez, el elegido por Coudet para ejercer de enganche con la delantera. Sin embargo, el talaverano no respondió a las expectativas creadas y Veiga se adueño rápidamente de esa posición a base de buen juego.
La irrupción del joven mediapunta en la Liga está siendo abrumadora, con cuatro goles y dos asistencias en 16 partidos. Ha participado directamente en seis de los 17 tantos que suma el Celta en Liga, lo que supone una incidencia activa en el 35% de los goles olívicos. Su asociación con Iago Aspas está siendo la tabla de salvación del Celta, pues entre los dos han marcado 12 de los 17 goles del conjunto celeste.
Su gran impacto en el campeonato liguero se ve reflejado en los datos de Inteligencia Artificial de Olocip, pues Gabri Veiga es el tercer mejor jugador sub-20 de la Liga, únicamente superado por Pedri y Nico Williams, dos internacionales con la selección absoluta. El porriñés es una de las grandes promesas del fútbol español y una auténtica realidad en el presente del Celta.