En busca de Enzo Loiodice
Pese a los vaivenes en el centro del campo, el galo parece condenado al ostracismo en la recta final de liga. Estuvo inédito en los últimos cuatro partidos.
Ni que viviera en un eterno proceso de maduración, anda Las Palmas a la espera de la mejor versión de Enzo Loiodice. Con un contrato firmado hasta 2026, el mediocentro galo ha ido perdiendo poco a poco protagonismo con Diego Martínez. Tras una dura pero aprobada adaptación a Primera la temporada pasada, 1.791 minutos el curso pasado en 19 partidos, 14 de ellos como titular con García Pimienta en la banda, ahora parece condenado al ostracismo.
Ni terminó de arrancar este curso con Luis Carrión ni parece que vaya a hacerlo ya con el propio Martínez como jefe. De hecho, en los últimos cuatro partidos ni siquiera fue utilizado y en el anterior, en Mallorca, fue sustituido por Benito antes del descanso, claramente señalado ante la tunda que se estaba llevando su equipo.
Que se sepa, sin lesiones aparentes, su falta de minutos obedece únicamente a una decisión técnica de su entrenador. De hecho, ante Barcelona, Valladolid, Betis y Alavés fue uno más en el banquillo. Y en eso que en el eje del equipo todo parecía dispuesto, en este ciclo de 12 puntos, apenas dos se llevó Las Palmas, para que Loiodice asumiera los galones negados hasta la fecha.
Resulta que Campaña ya había jugado en Mallorca tras varias semanas lesionado, y durante la visita del Barça también participó en el centro del campo pese a la falta de ritmo. En Valladolid se alinearon de inicio Essugo y Campaña y en la segunda parte entro Bajcetic, que repitió como central ante el Betis varios días después.
Una nueva torpeza de Essugo le costó otra expulsión en el Benito Villamarín, y no por eso Loiodice saltó al césped. Tampoco ante el Alavés, donde Campaña y Bajcetic fueron sustituidos en el descanso pero no por el pivote francés sino, respectivamente, por Manu Fuster y McBurnie.
Ahora, ante el Celta, se abre una nueva oportunidad para Loiodice, las que tuvo en este comienzo de año por las sanciones a Essugo. De momento todos sus compañeros parecen estar disponibles para el trascendental partido de Vigo, así que salvo sorpresa le toca empezar de nuevo en el banquillo. Y también acabar. Parece su sino en un curso en el que apenas se le ha visto 498 minutos en 15 partidos, solo cinco de ellos ubicado en el once inicial.
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