Aymane Jelbat, en la agenda del Bilbao Athletic
Joven central del Barakaldo cedido desde el filial del Alavés con siete años de formación en Euskadi. El Villarreal le tentó. En enero se valoró su fichaje para Lezama.
Aymane Jelbat (Casablanca, 27 de mayo de 2000), central zurdo del Barakaldo cedido por el filial del Alavés, al que sondeara el Villarreal antes de que tuviera los papeles en regla, se abre camino en el fútbol vasco en el que desembarcó hace siete temporadas tras atravesar media Europa desde Suecia pasando por Almería. El Athletic, según ha podido saber AS, le somete a un seguimiento desde hace meses e incluso en el mercado invernal de enero se planteó seriamente su fichaje para el Bilbao Athletic, aunque finalmente no cuajó. Se captó, por contra, al central de la Mutilvera Asier Pérez (2003), al extremo del Portugalete Quicala Bari (2001), con una trayectoria personal similar a la que Aymane de estancia en suelo vasco, y al delantero Izeta (1998) de la SD Amorebieta negociando con la SD Eibar, su club de pertenencia. El zaguero marroquí del Barakaldo siguió, sin embargo, en Lasesarre y ha logrado el ascenso a Segunda Federación cinco jornadas antes de tiempo en parte por su fiabilidad en el eje de la zaga del equipo de Imanol de la Sota.
Jelbat, que puede desenvolverse como central o lateral izquierdo, pasó por el CD Vitoria, Amurrio y el San Ignacio, segundo filial del Alavés, aunque tuvo una lesión que le impidió acabar la temporada. De hecho, sigue viviendo en el centro de Vitoria, desde donde viaja cada día a los entrenamientos del equipo fabril. En su trayectoria destaca su formación anterior en su país en el seno de la Academia Mohamed VI de Casablanca, en la que coincidió con los internacionales por Marruecos Youssef En-Nesery y Azzedine Ounahi.
En el verano de 2015, con 15 años, participó con el Raja Casablanca en un torneo en Suecia, la Gothic Cup. En Göteborg decidió escaparse de la concentración de su equipo junto a otros siete compañeros más. Se embarcó en su fuga en un tren rumbo a Estocolmo y a Mälmo. Atravesaron la frontera con Dinamarca, cruzaron Alemania con escala en Hamburgo. Después, Bruselas, París, y en autobús hasta Almería bajando por toda España. Allí incluso trabajó varias semanas en los invernaderos y se enroló en el Níjar. Fue cuando Aymene decidió desplazarse a Vitoria esperanzado por el cable que le tendía un amigo de su familia. El pasado mes de julio, una vez formado por los tres equipos alaveses, le captó el Barakaldo por mediación de su director deportivo, Joseba Núñez.
En el equipo pilotado por De la Sota corrobora lo que ya apuntaba desde el Amurrio en la Tercera División cuando tenía 18 años, con muchos ojeadores alertados por su velocidad y capacidad de salto con su 1′84, que ya le empezaron a seguirle la pista. El Alavés lo vio claro. El Barakaldo, que aspira a recuperar el prestigio perdido con el plan de ascender el próximo curso a la Primera Federación, también. El Athletic no le pierde de vista tras recabar informes desde la primera vuelta de la presente temporada. “Es un jugador que puede llegar alto, tiene madera”, aseguran fuentes consultadas sobre Jelbat, que tiene mucho margen de mejora.