Victoria y despedidas en el Galatasaray de Morata
El club turco celebró el título liguero en el adiós de Mertens y Muslera. También se ovacionó a Osimhen cuando fue sustituido.
El Galatasaray, campeón de la liga turca por tercera temporada consecutiva, ha cerrado el curso con un cómodo triunfo frente al Başakşehir (2-0). Gracias a los goles de Mertens (minuto 17) y Osimhen (81′), los de Okan Buruk han garantizado terminar la competición con una diferencia de al menos 11 puntos frente al Fenerbahçe de Mourinho.
Con este gol, el atacante nigeriano, que ha sido el máximo anotador de la Superliga turca (25 tantos), ha aumentado su récord en la que ha podido ser su despedida. De hecho, fue aplaudido por la afición cuando fue sustituido. Un gesto a tener en cuenta ya que su continuidad en el club es una incógnita y se espera que anuncie en los próximos días una decisión sobre su futuro. Por otro lado, Morata no estuvo convocado para el partido, ya que le dieron permiso para incorporarse a la Selección.
Además, ha sido un partido de despedidas. Porque Mertens, uno de los goleadores del encuentro, y Muslera, leyenda del conjunto turco, han disputado el último duelo con la camiseta del Galatasaray.
Un adiós que ha sido correspondido con una larga ovación por parte de los 55.500 aficionados cuando los dos jugadores han sido cambiados (Mertens en el 72′; Muslera, en el 89′). Ante esta respuesta del público, ninguno de los dos protagonistas ha podido evitar las lágrimas. Hasta Icardi, que estaba en la grada, se emocionó durante la despedida. Este adiós ha supuesto la retirada del belga, mientras que el guardameta alargará su carrera al menos una temporada más en otro equipo.
Con el final del partido, el Galatasaray celebró su 25º título liguero. Una fiesta que dará que hablar durante mucho tiempo, ya que se trasladaron drones de cinco estrellas desde lugares importes del club, como el Liseo de Galatasaray, la Isla Galatasaray, las instalaciones del Florya Metin Oktay y las nuevas instalaciones del Kemerburgaz, hasta el estadio Ali Sami Yen Rams. Además, se proyectaron hologramas de Muslera, Mertens y Osimhen en el cielo. El estadio se pintó completamente de luces amarillas y rojas. Este espectáculo fue considerado la fiesta del siglo.
Finalmente, todos los futbolistas acudieron a la plataforma preparada para la ocasión con sus familias mientras sonaban sus canciones favoritas y empezaron a saludar a la afición. El entrañable hijo de Mertens, Ciro, fue uno de los focos de atención durante la celebración.
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