La Copa y el viaje a Soria reactivan los cánticos de apoyo a Simeone

La fiesta itinerante por la Copa empezó en Madrid, continuó en Almazán y terminó en Soria para la afición del Atlético. En Los Pajaritos, el partido sirvió para que los rojiblancos se ahorraran sustos y disgustos deportivos y para que los desplazados hicieran que Simeone se sintiera reforzado por parte de la afición. El ‘Ole, ole, ole, Cholo Simeone’ retumbó en la grada y se repitió continuamente.

Porque esta temporada esto no ha sido nada habitual en el Metropolitano. Si habitualmente era uno de los primeros cánticos de la afición en casa, en las últimas semanas apenas se escuchó. En Soria sí. Ya desde la mañana en Almazán. En Los Pajaritos, de hecho, los hinchas desplazados estaban encabezados por una pancarta que decía: “La familia ante todo”. Simeone, en la rueda de prensa previa a la cita con el Espanyol, ya explicó: “Somos una familia y es momento de estar todos juntos”. Un mensaje de unidad que en Soria se hizo palpable.

Tras el encuentro, el propio técnico hizo referencia a ese aliento de la gente: “Doy las gracias a los aficionados del Atlético que vinieron. Estuvieron muchos y nos alentaron todo el partido. No estamos mereciendo tanto cariño como se nos demostró. Estar juntos nos hace bien y nos hará crecer”. De nuevo el mismo deseo de unidad para el futuro. Cuando el árbitro pitó el final, los futbolistas rojiblancos se acercaron a los hinchas desplazados para devolverles los aplausos.

Durante el partido también agradeció Simeone el apoyo y los cánticos y levantó las palmas para aplaudir el gesto. Para el Cholo era una cita importante y, pese a las cuatro categorías de diferencia con el Almazán, el técnico formó un once casi de gala para conseguir por fin su triunfo 350 como entrenador del Atlético tras cinco partidos estancado en los 349. La Copa se enfoca ya como la única vía para levantar un título esta temporada...