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REAL MADRID-ATLÉTICO DE MADRID

Courtois, héroe en 2013... villano en 2023

El belga se exhibió en la final de Copa de 2013 con el Atlético. La afición le adoraba, recibió un mecherazo en el Bernabéu... hoy es persona non grata en el Metropolitano.

Courtois celebra el título de Copa del Rey en el Santiago Bernabéu.
Courtois celebra el título de Copa del Rey en el Santiago Bernabéu.JAVIER SORIANOAFP

Copa del Rey, Santiago Bernabéu y un portero bajo el foco: Thibaut Courtois. El guardameta belga volverá a situarse bajo palos en un derbi copero, pero lo hará desde el otro lado, ejerciendo como local. Las dos anteriores en el torneo, había defendido la meta del Atlético. Y, el 17 de mayo de 2013, buena parte del fin del gafe rojiblanco ante su eterno rival llegó gracias a las intervenciones de Courtois.

El Atlético acababa con 14 años sin vencer al Real Madrid en el mejor escenario, la final de la Copa del Rey y en el Santiago Bernabéu. Diego Costa igualaba el imparable testarazo de Cristiano y en la segunda mitad y la prórroga, cuando más apretaban los blancos, llegaba el momento de Courtois. Varias manos extraordinarias y una inolvidable, cuando se agigantaba ante Özil para evitar un gol cantado y que permitía que Miranda sellase su nombre en la historia del club. El meta desespero a la afición local, que acabó impactando con un mechero en la cabeza del guardameta del que tuvo que ser atendido.

De ahí a la celebración del título, con aquel “salta, salta, salta, pequeño canguro...” de boca de un Courtois que era héroe de la afición atlética. Un periodo que consiguió estirarse un año más con una nueva cesión desde el Chelsea donde se ganó la Liga y se perdió la final de Champions ante el propio Real Madrid (además de caer en semifinales de Copa). Una década después, volviendo al 2023, Courtois es el ídolo del Santiago Bernabéu en su quinta temporada consecutiva defendiendo la portería del Real Madrid. De unas primeras fechas cuestionado a volver a instaurarse en el top de mejores porteros del mundo.

Y hoy será el gran escollo para un Atlético donde su nombre produce dolor entre los aficionados. Courtois se ha convertido en una persona non grata en el Cívitas Metropolitano. Sus declaraciones (”ahora estoy en el lado bueno”) y grandes actuaciones en los derbis han ido borrando el recuerdo de un guardameta que fue dos temporadas Zamora vistiendo la rojiblanca y que levantó cuatro títulos bajo el mando de Simeone en tres temporadas para labrarse un nombre y dejar patente que era guardameta para muchos años. Es más, su placa en el ahora Paseo de los Centenarios (antes de Leyendas) fue arrancada, repuesta y actualmente vigilada. Hace semanas, la Comisión Social del Atlético exigió una disculpa de Courtois para que siga teniendo su placa en el Metropolitano. El meta mandó una carta: agradeció los años en el Atlético, pero recordó que la afición le acosa. Hoy vuelven a verse las caras. Y los colchoneros nunca le ha derrotado (el triunfo del curso pasado fue con Lunin bajo palos). Quien hace una década era el ángel colchonero, ejerce hoy de local en el Bernabéu como el gran reto que sortear para poder estar en semifinales.