Y con el tiempo, la presencia de Figo quedó en anécdota...
La afición prefirió disfrutar del gran partido ante el PSG aunque si que insultó al portugués al inicio.
El pasado julio se cumplieron 25 años del fichaje de Luis Figo por el Real Madrid. En aquel momento, era el capitán del Barcelona y uno de los futbolistas más queridos por la afición. Su marcha dejó una herida tan profunda que jamás cicatrizará. En su condición de asesor de fútbol de la UEFA, acompañó a Aleksander Ceferin a Barcelona para presenciar el partido ante el PSG, un detalle que no gustó y no pasó inadvertido en la Ciudad Condal. Se lo linchó en las redes y en el estadio de Montjuïc fue recibido con el cántico que se hizo famoso en el 2000 cuando regresó al Camp Nou. “Ese portugués, que hijo p... es”.
Pero con el paso de los minutos, su presencia fue anecdótica. Como una más en un palco presidencial donde también estaba Joan Gaspart, que horas antes había dicho que no lo saludaría. “Para mí, es una persona non grata”, dijo. No hay que olvidar que su mandato presidencial se estrenó con la pérdida de Figo y que su adiós coincidió con años de sequía azulgrana.
Pero la afición escogió disfrutar del partidazo del PSG y olvidarse de su presencia con el paso de los minutos.
Buen rollo con Ceferin
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