Aprobados y suspensos del Liverpool: el Rey Champions fue menguando a los 'reds'

Finalmente Klopp decidió jugar con toda su artillería pese a los rumores de que Thiago estaba mal en el calentamiento. El mediocentro español llegó a ser sustituido en la previa del partido por Naby Keita, pero tras probarse salió sin problemas a disputar la final. Fabinho, que llegó a ser duda para el partido del Stade France, también fue titular.

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Estadísticas

Alisson: su primera mitad fue correctax, aunque en el gol anulado a Benzema dejó dudas al salir y estuvo a punto de emular a Karius justo antes del descanso, pero esta vez la fortuna estuvo del lado del brasileño. En la segunda parte, no pudo hacer nada en el gol de Vinicius ya que el centro-chut de Valverde le desconcertó completamente.

Alexander-Arnold: su duelo ante Vinicius era una de las claves del encuentro y el lateral apenas sufrió con su pareja de baile durante los primeros 45 minutos. Generó dos ocasiones claras de Salah y fue un peligro constante en la banda derecha. Sin embargo, apareció en la foto del gol, incapaz de leer el centro-chut de Valverde que acabó en gol de Vinicius tras cogerle su espalda.

Konaté: el francés volvió a evidenciar que es un jugador con un poderío físico fuera de lo normal. Le sacó a Vinicius un uno contra uno con una facilidad extraordinaria y sus poderosas conducciones superaron líneas. Su segundo tiempo fue correcto, pero no pudo hacer nada en el gol de Vinicius.

Van Dijk: no sufrió apenas en el primer tiempo con Benzema ya que el Liverpool monopolizó casi todos los ataques. Sin embargo, rompió el fuera de juego en el gol anulado al francés justo antes del descanso. En el gol de Vinicius, el balón pasó por delante de él antes de acabar en las botas del brasileño.

Robertson: mucho más tímido que Arnold en las subidas. Sólido en defensa y poco participativo en campo rival durante el primer tiempo. El Liverpool añoró bastante sus internadas por la banda izquierda. Para más inri, midió mal a Valverde en el gol de Vinicius.

Thiago: un temporizador. Organiza, agita, mueve el balón de lado a lado… Apenas importaron sus problemas físicos antes de la final. Fue de más a menos y acabó siendo sustituido por Firmino. El físico apenas le duró 60 minutos.

Fabinho: el sostén del Liverpool. Cuando Fabinho está bien, el equipo gana velocidad con balón y, además, sufre mucho menos las transiciones rivales. Jugó un primer tiempo bastante completo par potenciar a Thiago. Tras el 1-0 del Real Madrid, perdió incidencia en el partido y sucumbió ante Modric y Kroos en el centro del campo.

Henderson: su trabajo sin balón fue opuesto a lo que aportó cuando el Liverpool atacaba. Lo intentó en el primer tiempo con varias rupturas a la espalda de Mendy, pero no le encontraron. El segundo tiempo que hizo fue bastante discreto y por ello acabó sustituido por Naby Keita.

Luís Diaz: bastante superado por Carvajal en el primer tiempo. Lo intentó constantemente, pero el lateral del Madrid se le impuso bastantes veces. Fue el primer cambio de Klopp en el segundo tiempo ante su incapacidad de superar a Carvajal.

Salah: No estuvo acertado en la primera mitad. Un remate alto, un testarazo a las manos de Courtois y otro remate a bocajarro fueron de las ocasiones más destacadas del Liverpool en sus botas. De sus botas nacieron las dos ocasiones más claras de los de Klopp en el segundo tiempo, ambas repelidas por un inconmensurable Thibaut Courtois.

Mané: gozó en el primer tiempo de la ocasión más clara con un remate que, milagrosamente, sacó Courtois antes de estrellarse su remate en el poste. Su partido fue de más a menos y acabó bastante cansado por el gran esfuerzo físico que hizo durante los 90 minutos.

Sustituciones

Diego Jota: Klopp le ingresó en el segundo tiempo para intentar mejorar el flojo partido de Luis Díaz en la banda izquierda. Gozó de una oportunidad muy clara en un centro-chut de Salah que repelió Courtois, pero su impacto en el encuentro no fue el esperado.

Firmino: su participación fue prácticamente testimonial. No tuvo impacto en el encuentro.

Naby Keita: salvo un disparo mordido en la frontal que, aparentemente, era una oportunidad flagrante para el Liverpool, el centrocampista no pudo imponerse en el centro del campo.