El valor añadido del escudo
Íñigo, Pablo Torre, Camus y Mantilla, crecidos todos ellos en La Albericia, han jugado un papel clave y siempre han hecho alarde de su racinguismo
Una de las primeras condiciones que planteó Josemari Amorrortu cuando se hizo cargo de la dirección deportiva del Racing fue la de abrir una ventana importante en el primer equipo a los jugadores de la cantera. Y lo hizo. Sin necesitarlo, porque todos eran Sub-23 y podrían haber tenido licencia con el equipo filial, seis canteranos subieron desde el inicio a la plantilla de Segunda B: Ceballos, Mantilla, Íñigo, Martín Solar, Camus y Pablo Torre, aunque este mantuvo ficha del Juvenil. Un año más tarde se ha demostrado que aquella decisión fue acertada y cuatro de aquella hornada han sido jugadores importantísimos en el ascenso de esta campaña.
Aunque Guillermo Fernández Romo le abrió en pretemporada la puerta de salida a Martín Solar, que ha sido el futbolista que más minutos ha jugado en el filial del Granada en Segunda RFEF, y no contó para nada con Diego Ceballos, que ahora se jugará el ascenso a Primera RFEF con el Teruel frente al Mérida, los otros cuatro han tenido un peso importante en el equipo del ascenso. Líderes absolutos Pablo Torre e Íñigo y entrando y saliendo del once a lo largo del curso Marco Camus (30 partidos) y Álvaro Mantilla (27).
El valor añadido del escudo
Marco Camus, tras marcar el gol de la victoria frente al Valladolid Promesas.
Otra de las fotos icónicas de la temporada: Pablo Torre presumiendo de racinguismo tras su doblete al Rayo Majadahonda.
El gol clave de la temporada, el de Íñigo en Riazor. Y acabó con la mano en el pecho.
Partido Deportivo de La Coruña - Racing de Santander. gol
Marcó un gol, el de la victoria en Salamanca, pero la foto es de una sesión para una previa del AS.
Más allá de los goles, 14 entre los cuatro, o las asistencias, 15, estos cuatro canteranos han sido referencia absoluta en cuanto a compromiso y relación con la grada. Racinguistas todos ellos desde la cuna y criados en las Instalaciones Nando Yosu desde su más tierna infancia, sus guiños a la grada han sido constantes y no ha sido nada complicado, como se puede ver en las fotografías que acompañan a este artículo, verles presumir de escudo en cuanto han tenido algo que celebrar. Y no solo han besado el escudo, uno de los grandes momentos de la temporada fue cuando Pablo Torre, recién traspasado al Barça, marcó un gran gol en Talavera y se fue hacia la esquina en donde estaba la afición racinguista para decirles con gestos inequívocos: "me han traspasado, pero mi cabeza sigue aquí hasta el final". Y el tiempo ha demostrado que decía la verdad.
De cara al próximo curso, con Pablo ya en Barcelona, el Racing ya ha renovado a Mantilla hasta 2024 y a Camus un año más, hasta 2025. Con Íñigo, uno de los jugadores que más expectación está levantando entre ojeadores de Segunda e, incluso, de Primera, han comenzado los contactos exploratorios de cara a una ampliación de contrato. El capitán del equipo finaliza su relación con el Racing la próxima temporada y quedaría libre, si no se prorroga, el 30 de junio de 2023. Íñigo tiene un contrato que ahora le llevaría a cobrar el mínimo de convenio en LaLiga Smartbank, algo absolutamente incomprensible para el que ya es, dentro y fuera del campo, el jugador referencia del equipo. El plan del Racing es ampliar su contrato este verano, pero sabe que no será fácil porque ya hay clubes que se han puesto en contacto con sus agentes.
