Hazard se apunta a París
Ancelotti y el club le ven muy mejorado sin la placa del tobillo y su reto ahora es meterse en el grupo de los potenciales relevos en la final de la Champions.
Eden Hazard está de vuelta y en una forma que ha sorprendido a buena parte de los niveles superiores del Real Madrid, incluyendo a Carlo Ancelotti. El belga cuajó muy buenos minutos en la visita blanca al Cádiz y en los entrenamientos viene mostrando que ya está capacitado para meter una marcha más a su juego, esa marcha a la que el dolor en el tobillo no le permitía llegar. A la temporada le queda solo un partido, el más importante del año, un día para jugadores en velocidad de crucero, pero el reto de Hazard ahora pasa por entrar en los hipotéticos planes de Ancelotti para los relevos en París ante el Liverpool, sobre todo en la eventualidad de un final con necesidad de remontar o de una prórroga.
En la última jornada de Liga, ante el Betis, Hazard no dispuso de minutos, aunque su ausencia de participación vino marcada, sobre todo, por las necesidades de Ancelotti y por los merecidos homenajes a los que acaban contrato y se marchan. El técnico ya había avisado de que el duelo era un ensayo general de cara a París y lo fue. Así, los primeros cambios fueron Valverde y Camavinga: el primero apunta a titular, aunque Rodrygo tiene opciones; el segundo sabe que, si vienen mal dadas, tiene la confianza de Ancelotti para cambiar el partido en el medio. Y luego les tocó a Marcelo e Isco, dos que terminan contrato y que pudieron despedirse de la afición, y Ceballos, otro con opciones de tener algún minuto en París, cuya continuidad tampoco es segura y para el que, además, los duelos ante el Betis siempre son algo especial, pues es hincha del equipo desde niño y salió de su cantera.
Hazard tiene ahora por delante la misión de convencer a Ancelotti en los entrenamientos que le quedan de que está para ser del grupo con opciones de jugar ante el Liverpool, un equipo ante el que, además, tiene experiencia: ha jugado 15 partidos ante los 'reds', de los que ganó cuatro, perdió otros cuatro y empató siete. Y lo más importante: marcando cinco goles.
Su temporada hasta el momento, marcada por las lesiones, la operación de tobillo en la que le retiraron la placa de titanio y la escasa confianza de Ancelotti, que no le veía listo cuando jugaba con dolores en esa zona, deja un bagaje muy escaso: un gol y dos asistencias en 903 minutos. Empezó de titular en las primeras jornadas, pero el ascenso de Vinicius le pasó por encima.
Sin Mbappé, más sitio para Hazard
Juegue algunos minutos en París o no lo haga, lo que es seguro es que Hazard ya sabe que tiene mejores papeletas para jugar con fluidez el año que viene debido a la noticia que ha convulsionado al Real Madrid: la negativa de Mbappé a firmar por los de blanco. La llegada del francés iba a apretar todo el engranaje ofensivo blanco, a endurecer mucho la competencia por los minutos, con Mbappé, Benzema y Vinicius partiendo como teórico ataque titular. Pero el francés no jugará en el Madrid 2022-23 y, sin él, varios jugadores saben que la pelea ya no será tan dura: Asensio, Rodrygo, Valverde... y Hazard.
Sin Mbappé, las posiciones están bastante claras: Vinicius es el extremo izquierdo, Benzema el delantero centro y queda el extremo derecho abierto a candidaturas, con Valverde y Rodrygo actualmente como principales pretendientes. La capacidad de Hazard de jugar por la derecha (lo hizo con cierta asiduidad en el Chelsea, aunque su lugar predilecto es la izquierda) le mete de lleno en la pelea, por no hablar de que vuelve a tener papeletas para jugar todo lo que Vinicius no juegue. Para ello tiene que recuperar el nivel de antaño, el que llevó al Madrid a pagar 100 millones de euros por él. De momento, progresa adecuadamente.