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ATLÉTICO DE MADRID

El acelerón final de De Paul

El argentino ha elevado su rendimiento en el último tramo del curso tras las dudas y la intermitencia de los meses anteriores. Se cuenta con su mejor versión para el futuro.

Actualizado a
De Paul, en el entrenamiento del Atlético de Madrid
ATLÉTICO DE MADRID

No es suficiente, quizá sea tarde, pero De Paul está dando ese paso al frente que se esperaba. El argentino ha elevado su rendimiento en los últimos partidos y empieza a ofrecer esas sensaciones que sí dejó ver en algunos momentos del primer tramo del curso, pero de forma irregular. El Atlético cuenta con él (y con su mejor versión) para el futuro, y con que aporte unas cifras más parecidas a las de Udinese, a las que llevaron al Wanda Metropolitano.

De Paul lleva tres goles y dos asistencias en esta temporada, lejos del 9+11 del pasado curso en Italia. El último tanto lo logró hace dos jornadas, en Elche, broche a una buena actuación del centrocampista. Contra el Sevilla, el argentino solo hizo un remate a puerta, pero generó cuatro ocasiones de gol, el que más del partido, especialmente implicado en que Suárez viera portería, y también el rojiblanco que más pases buenos dio en campo contrario (23), seguido por Koke (15).

Simeone ha encontrado acomodo para De Paul junto al capitán y a Kondogbia, el nuevo triángulo del centro del campo. El francés guarda las espaldas a sus compañeros, más sueltos para generar peligro. Según los datos de inteligencia artificial que recoge Olocip, el argentino es el segundo futbolista que más valor ha generado para el Atlético, 7,05, solo superado por João Félix. Es el mejor en servicios a balón parado, en pases al hueco y en pases buenos en general.

En Italia siguen suspirando por el argentino, con el Inter como pretendiente más insistente, pero el Atlético no lo tiene en su lista de transferibles. El primer curso se ha considerado de transición y adaptación y para el segundo se le exigirá nuevamente lo que prometía. Antes, ante la Real Sociedad, De Paul debe dejar un buen sabor de boca como punto y final a un año complicado.