La Policía avisa: "El partido más complicado de los últimos años"

Sevila se viste de gala para acoger la final de la Europa League en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán y a la vez teme por una seguridad que ya está en vilo de cara a la llegada de miles de aficionados del Eintracht de Frankfurt y del Rangers. Las cifras estimadas podrían acercar hasta la ciudad hispalense a unos 100.000 hinchas del club escocés y más de 50.000 del conjunto alemán. Todo un desafío para la ciudad y para la Policía Nacional, que tras una reunión de coordinación del dispositivo se mostró tajante: "Es el partido más complicado de los últimos años". Así de claro se expresó Juan Carlos Castro, comisario jefe de la Brigada General de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, sobre la estimación de 150.000 hinchas en la ciudad. 

"Es demasiada gente con demasiado alcohol, la mayoría sin entradas para el partido y muchas obras en los alrededores de la ciudad, una receta que puede dar lugar a graves problemas", advirtió Juan Carlos Castro, que pidió paciencia a los ciudadanos durante estos días y ante los posibles inconvenientes que puedan suceder debido a la disputa de este partido. Sólo se repartieron 10.000 entradas para cada equipo, por lo que la mayoría de los aficionados que llegan a Sevilla no estarán en el recinto nervionense para ver el choque de mañana.

Desde hoy se multiplica la llegada de hinchas de ambos equipos y la Policía espera tener un dispositivo acorde para controlarlo todo. Uno de los objetivos del mencionado dispositivo es conseguir que no se crucen las aficiones, algo complicado debido al elevado número de visitantes. Los hinchas alemanes tienen colocada su Fan Zone en los jardines del Prado de San Sebastián y los escoceses en la zona céntrica de la ciudad, además de tener habilitada una pantalla para ver el partido en el interior del estadio de La Cartuja.