Galácticos... en otra galaxia

Haaland ha esperado al Real Madrid, con la esperanza de vestir de blanco el curso próximo, pero finalmente se ha unido al Manchester City. En el Paseo de la Castellana hubieran deseado que el noruego esperase un poco más, una temporada concretamente, para no cohabitar desde el primer día con un Benzema con aires de Balón de Oro y un Mbappé que aterrizará en verano, confían desde la entidad, como la gran estrella del próximo proyecto. Quiso ser Galáctico, ese apelativo que el primer Madrid de Florentino (entre 2000 y 2006) convirtió en marca registrada, pero su fútbol terminará expuesto en otra galaxia, la azul cielo de Guardiola. No es la primera vez que un crack, por una u otra razón, se queda a las puertas del equipo blanco, siempre ávido de hacerse con los jugadores más talentosos del mundo...

Ronaldinho

Ribéry

En 2010, Franck Ribéry triunfaba en el Bayern y trataba de discutir a Messi y Cristiano Ronaldo su eterno duopolio. El propio Cristiano, Kaká y Benzema habían llegado el verano anterior y el siguiente apuntaba a ser el de Ribéry, cuyo futuro parecía teñirse de blanco. Se hablaba de un traspaso titánico. El propio jugador lo reconoció en 2016: "Mis representantes negociaron con el Madrid. Tanto ellos como el Chelsea llegaron a ofrecer 80 millones de euros". Pero una comida lo dinamitó todo. "Cuando la historia de Ribéry en el Bayern parecía llegar a su fin en 2010 porque sus agentes más o menos lo habían vendido al Madrid, lo invitamos a comer con nosotros, a él y a su esposa Wahiba. Susi cocinó halal especialmente para ella. Pasamos una velada maravillosa, y alrededor de la medianoche Wahiba finalmente dijo: '¡Franck, nos quedamos en Munich!", narró Uli Hoeness, expresidente del Bayern. Y así se gestó su 'no fichaje' por el Madrid...

David Villa

Otro gran culebrón con el equipo blanco implicado tuvo lugar en veranos consecutivos, pero fue en 2009 cuando todo parecía hecho. Antes de que llegase Benzema, el '9' apuntaba a ser David Villa. El Guaje lo tenía claro: "Sólo quiero ir al Real Madrid". "Yo pertenecía al Valencia y dije que saldría de allí cuando ellos quisieran. No se dieron las circunstancias para ir al Madrid en ese momento. Tenía que existir la voluntad de los dos clubes y el del jugador y ningún año de los dos que hubo negociaciones se acabó dando esta situación", explicó Villa en una entrevista con DjMario tiempo después. En 2010 sería el Barça el que se hacía con el máximo goleador de la historia de la Selección y el Atleti también disfrutaría de su olfato. Algo que nunca pudo hacer el Madrid. Y no fue por no intentarlo.

Un fax, un deseo perenne, un pacto de no agresión...

Hay más casos en el pasado reciente que seguro aparecen en la memoria del madridismo. David de Gea y el fax. Ese que contenía la documentación necesaria para cerrar el fichaje del por guardameta en 2015. Entró tarde, 28 minutos concretamente pasada la media noche, y ahí se terminó el caso De Gea. También otro exatlético estuvo muy cerca del club vecino, el Kun Agüero. En 2011, el argentino quería luchar por títulos y le atraía cambiar de bando en la capital. Sin embargo, el pacto de no agresión entre Madrid y Atleti frustró el traspaso del que sería, posteriormente, leyenda del City y se retiraría en el Barça.

Tampoco se puede dejar de lado a Paul Pogba, una persecución perenne que nunca se convirtió en caza. Zidane era un enamorado del centrocampista francés, llegado a golpe de billetes al United, y ese fue el prinicipal problema para hacerse con él, las cantidades desorbitadas que demandaban desde Old Trafford. Se intentó en 2016, en 2019, en 2020, había opciones en 2021..., pero el sueño de Zizou nunca se hizo realidad. Será libre en junio, pero el centro del campo blanco está bien cubierto en clave presente (CMK) y también futura (Camavinga, Valverde, ¿Tchouaméni?). Como siempre en estos casos, son todos los que están, pero no están todos los que son. Haaland ha sido el último en sumarse a la lista.