Desvelada la conversación entre jugadores del Barça antes de la segunda parte ante el Rayo
Araújo tomó la voz cantante para alentar a sus compañeros en busca de la victoria. Después, Gavi explicó indignado a Catena que su empujón era penalti.
#Vamos ha sacado a la luz unas significativas imágenes sobre cómo afrontó el vestuario del Barcelona el arranque de la segunda mitad ante el Rayo Vallecano. En ese momento, caían por un gol a cero en el marcador y apenas habían generado peligro sobre la portería de Dimitrievski. Con la provisional derrota, que posteriormente se confirmó, el Barça perdía un tren importante para sacar ventaja por la segunda plaza y necesitaba urgentemente una reacción. La voz cantante la tomó... Ronald Araújo.
El central uruguayo, en las imágenes presentadas por #Vamos, alza la voz y se dirige a sus compañeros: "En el segundo tiempo somos otro equipo. Salimos fuertes, sabemos lo que tenemos que hacer". Es entonces cuando Jordi Alba rompe el silencio del resto y continúa: "Hay que sacarlo, metemos uno y ya está. Vamos". Cierra el propio Araújo, con una sentencia de máxima exigencia sobre los suyos: "No podemos hacer el tonto. Vamos con todo, que tenemos un equipazo".
El informativo de Movistar Plus+ también ha mostrado cómo Xavi salía al césped tras el descanso. Pasa por delante de los jugadores y les alienta: "Vamos, vamos, vamos". Algunos tenían el gesto cabizbajo y no tuvieron apenas reacción a las palabras de su técnico. Una respuesta que no tuvo nada que ver a la de los compases finales, cuando toda la plantilla y el banquillo al unísono reclamaron penalti sobre Gavi y se mostraron realmente indignados.
El protagonista de la acción, Gavi, se enfadó con Dimitrievski cuando este le levantó rápidamente del suelo agarrándole de la camiseta y se dirigió a él: "Y tú, ¿qué pasa? Y tú más". No ha salido a la luz la frase por la que el joven futbolista llega al común "y tú más". Catena, autor del empujón no señalado, también le hizo saber al canterano blaugrana que la acción no era suficiente como para señalar pena máxima. Este, indignado, responde: "Pero si me llevas por delante. Es de libro. Me empujas. No es un mínimo contacto, mínimo, mínimo. Eso se pita siempre, siempre".