Marcelino: "¿Sustituir a Luis Enrique? Esa situación está alejada de la realidad"
El técnico del Athletic apunta que no tiene prisa por decidir su futuro y espera la opción de hablar con los candidatos a la presidencia. "De todos los equipos que he entrenado, este es el que más actitud tiene"
Está sobre la mesa la posibilidad de ejercer como relevo de Luis Enrique en la Selección en diciembre, pero pide respeto hacia su paisano asturiano. "Es una situación alejada de todo punto de vista real, hay un seleccionador que lo está haciendo francamente bien, hablamos de una hipótesis basada en nada, sería irrespetuoso barajar esa opción". Agrega que su representante vela por sus intereses, "pero la decisión la tomo yo, nunca me he precipitado en la misma, ni cuando era joven y no tengo ninguna prisa por saber mi futuro". Se ampara en su larga experiencia, "cuando ya tienes unos años relativizas todo, separas lo importante de lo secundario y lo importante es prestar el máximo servicio al equipo que es el mío, nos sentimos identificados y a gusto con esta plantilla y la ciudad". Por ello, confiesa que no da por cerrada la etapa en San Mamés.
Ni Barkala ni Arechabaleta, los dos candidatos de momento para la cita con las urnas, aunque solo el primero lo ha anunciado públicamente, se han dirigido al técnico. "Si en un futuro tienen la intención de hablar conmigo, lo harán en tiempo y forma; si ocurre, habrá un diálogo". Hace poco confesó que en caso de seguir Elizegi, él lo haría de su mano. Hay buena sintonía: "Sí, es muy importante, somos un cuerpo técnico que apreciamos que las relaciones personales son importantes, las hay con Aitor (Elizegi), el resto de la junta y Rafa (Alkorta, el director deportivo), con el que hablo todos los días. Para un entrenador hay dos cosas vitales: que los futbolistas crean lo que propone y que la directiva tenga confianza en lo que hace él, es como un sándwich, está en medio, si abajo y arriba creen en ti, es la situación ideal"
A García Toral no le afecta e proceso electoral a nivel de trabajo: "Está en el fútbol, pero trabajamos con absoluta normalidad, excusarnos en este proceso para aducir que dificulta nuestro trabajo, sería reprochable".
Las opciones europeas también centraron, una vez más, su discurso. La séptima plaza lleva a Europa, a no ser que el Villarreal gane la Champions, o el Betis ocupe un lugar fuera de billete europeo en Liga. "Imposible no hay nada. Será muy difícil o difícil en función de lo que hagamos nosotros y nuestros rivales. La única forma de acceder a esa plaza es ganar muchos puntos". Insiste en que el Submarino está por delante del Athletic en cuanto a favoritismo. "Posee más potencial, eso no significa que tiene que quedar por encima, en ocasiones el potencial no es indicador de una clasificación final", sostiene.
El técnico rojiblanco matizó una vez más sus palabras sobre el carácter ganador de Iñigo Martínez, y esa cualidad que, según mantiene, su equipo no posee en "exceso". "No digo ni dentro ni fuera que no lo tengamos y me enfada que se tergiverse y se achaque que hablo de falta de actitud; de todos los equipos que he entrenado, es el que más actitud y mentalidad diaria de trabajo tiene. Eso no quiere decir que los otros no lo hayan tenido, salvo uno, en el que no supe contagiar mis ganas de trabajar, no supe hacerme creíble", subrayó se supone que en alusión a aquel Sevilla que dirigió en 2011.
En Bilbao se habla muchas veces cuando hay una derrota del que el equipo está pensando en Ibiza. Muchos leones se van juntos a la isla balear. A Marcelino no le hacen gracia estas burlas. "A esta plantilla no se le puede discutir su actitud. Somos el equipo de los que más corren. Eso significa una forma de proceder. Y cuando se van de vacaciones lo hacen juntos, eso es compañerismo, me da igual que vayan a Ibiza o Estados Unidos. Eso para nada tiene que ser objeto de debate. Solo se pide que cuando están trabajando aquí sean compañeros y den lo máximo, que lo hacen".
Y va más allá: "No tenemos grandísimas estrellas, aunque sí magníficos jugadores, tenemos que alcanzar nuestra máxima intensidad para ganar los partidos. El gol tiene difícil solución, se tiene o no; somos uno de los equipos que más llegan, pero los números de definición no son buenos".
Sobre Simón, aclaró que arrastra las molestias en el hombro desde la Eurocopa, "que le impiden entrenar con máxima exigencia, ahora tiene un nivel aceptable, pero mejorable. Tiene fuerzas para revertir y llegar al máximo nivel". De Sancet y sus dolores en el pubis (el técnico se operó dos veces de esta dolencia cuando estaba en activo), lo ve como un proceso que le va a seguir dando la lata al canterano. Siguiendo con jóvenes promesas, no se pronunció sobre si Villalibre puede ser el 'nueve' de futuro del Athletic.
Como resumen de este año y cuatro meses, exhibe frases de satisfacción: "Desde mi llegada ha aumentado el nivel competitivo y no hemos tenido grandísimas incorporaciones. A veces el equipo mete pifias, pero en líneas generales, es muy competitivo. Me habría gustado ganar una Copa, lo cambiaba todo por eso, por la que jugamos ante la Real, nos la merecimos", finalizó.