El Pucela intentará evitar una nueva 'mirandada' en Anduva
En sus tres visitas en Segunda vivió esperpentos como el 4-1 de la 2015-16 y el 2-2 de la 2016-17 con remontada burgalesa que estaba con uno menos
El Anxo Carro de Lugo era uno de esos estadios, pocos, en los que el Real Valladolid no había conseguido ganar nunca y esta temporada lo logró con aquel 0-2 firmado por Weissman y Toni. Este sábado visitará otro de esos recintos en los que no ha logrado ganar, aunque es verdad que los vallisoletanos sólo han pisado Anduva en tres ocasiones, todas en Segunda y todas en los últimos ocho años, por tanto en el siglo XXI, aunque existe un precedente en Tercera División allá por la campaña 1970-71 que acabó con victoria para el Mirandés por 1-0.
Esos tres partidos en Segunda depararon dos empates y una victoria burgalesa. El más lejano fue en la campaña 2014-15 y el resultado fue de 0-0. En el Valladolid dirigido por Rubi jugaron Varas, Rueda, Samuel, Bergdich, Peña, Chus Herrero, Timor, André Leao, Mijica y Jefren (también jugaron Gille Andrés, Óscar Díaz y Omar). Esa campaña el Valladolid jugó el palyoff que perdió en la semifinal ante Las Palmas y el Mirandés fue octavo, firmando una gran campaña quedándose a dos puntos de disputar el playoff de ascenso.
La derrota del año siguiente, 2015-16, fue especialmente sangrante, ya que la gran plantilla, que no gran equipo, que dirigía Portugal perdió de forma estrepitosa en una de esas 'mirandadas' que los aficionados recuerdan y que esta vez Pacheta intenta evitar. 4-1 fue el resultado con goles de Galán, Provencio, Aridane y Álex García que lograban ridiculizar al Valladolid. El postrero gol de Guzmán de penalti no sirvió ni para maquillar el resultado ni para salvar la honra de un equipo que terminó pidiendo la hora en la temporada, con tres técnicos y salvando la categoría en el último suspiro. Incluso el Mirandés terminó en la tabla (15º) un puesto y un punto por encima del Real Valladolid que sólo pudo ser 16º.
El más reciente (2016-17) también fue un empate, esta vez con goles, 2-2 y con un recuerdo de 'mirandada' incluido, ya que los de Paco Herrera se pusieron pronto con 0-2 en el marcador gracias a los goles de Jose Arnaiz en el 15' y de Raúl de Tomás de penalti en el 37, acción en la que el Mirandés se quedó con uno menos por la expulsión de su portero Roberto; el conjunto de Anduva se veía con 10 y un 0-2 sin haber llegado al descanso, pero tras la reanudación llegó un nuevo penalti señalado por el árbitro y transformado por Eguaras en el 57'; el pánico cundió en las filas blanquivioletas que desde la grada veían como su equipo naufragaba ante 10 y al final un gol en propia puerta del argentino Balbi ponía el definitivo 2-2 y consumaba la enésima decepción de una temporada que acabó sin el premio siquiera del playoff.