Venganza y Champions
Real Sociedad y Betis vuelven a verse las caras después de la goleada verdiblanca en Copa, con Europa en juego y hasta el premio gordo en la cabeza de ambos. Expectación en Anoeta.
El 12 de diciembre del 2021. Y el 3 de febrero de 2022. Aparentemente estas dos fechas no tienen nada en común. A simple vista no parecen tener ninguna conexión. Pero ambas desembocan en este 15 de abril de 2022. Por tercera vez esta temporada se ven las caras la Real Sociedad y el Real Betis, un duelo con claro sabor europeo y que llega marcado por los dos contundentes 4-0 que le endosó el cuadro verdiblanco al txuri-urdin. Es imposible desligar el partido de esta noche de esas goleadas, porque hay un equipo que llega tan dolido como picado, con todo el ánimo de revancha de puedan imaginar. Que te pinten la cara una vez en una misma temporada, pasa. Pero que te la pinten dos veces y el mismo equipo, con el mismo resultado, duele mucho más. Así que de entrada, aquel 4-0 del 12-12-21 en Liga, y el otro 0-4 del 3-2-22 en Copa, marcan este nuevo reencuentro entre la Real y Betis. Unos porque buscan la revancha, los otros porque creen que no hay dos sin tres (sigue el partido en directo en As.com).
A partir de ahí, llega la segunda parte de la ecuación: Europa. Se enfrentan el quinto contra el sexto, separados solos por dos puntos en la clasificación. Así que el choque es vital de cara a la pelea por la Europa League. Pero ahí más. Afianzados ambos en estos puestos europeos, mirando cada vez más lejos por el retrovisor a sus perseguidores, ambos quieren tener la ambición de mirar más arriba y sonar a lo grande: la Champions League. Con solo siete partidos por jugarse, se han ganado el derecho a que se les consideren como los outsiders de la lucha por la Champions. No estaban, quizá, llamados a tamaño objetivo, y su presencia tan cerca está poniendo muy nerviosos a los equipos llamados a pelear hasta el final por esos puestos. Así que el aliciente del partido es tremendo para ambos. Es como una final de Champions para los dos. No hay duda.
Entonces hemos quedado que el partido de esta noche tiene un componente de ganas de venganza, y otro de Champions. Pero para todo ello hay que descubrir a los artistas. En la Real, si Imanol quiere repetir lo que hizo en el Martínez Valero, solo tendrá una ausencia obligada, la de Zaldua sancionado, por lo que será Gorosabel quien de ocupe ese flanco derecho de la defensa. Y a partir de ahí, la duda es si volverá sacrificar las bandas, dejando en el banquillo a Januzaj y Portu, y apostará nuevamente por juntar la tremenda calidad de Zubimendi, Merino, Rafinha y Silva, con los dos Alexander (Isak y Sorloth) jugando arriba con mucha movilidad. Puede ser una buena medicina para frenar a los William Carvalho, Canales y Fekir, que poco tienen que envidiar a los primeros. Por dentro puede estar la clave del partido.
Y tanto Pellegrini como Imanol son conscientes de ello, para vivir su enésimo duelo que les lleve a soñar. Los pulsos caen del lado del chileno, pero el oriotarra aprende siempre de sus errores. Y esta vez, por mucho que el caramelo en Liga sea muy sabroso, habrá que evaluar cuánto piensa el Betis en la final de Copa. Porque el de San Sebastián en su ultimo encuentro antes de esa gran final copera que tiene obnubilada a toda la afición, y quizá la Real pueda aprovecharse de ello. A río revuelto, ganancia de pescadores, suelen decir, ¿verdad? Venganza y Champions… ¡menudo cóctel nos espera!