Casemiro: siete años sin sustituto
El centrocampista brasileño es el único jugador de la plantilla que no tiene un relevo claro. La posible llegada de Tchouameni solucionaría ese problema.
Siete años después de la llegada de Casemiro a la primera plantilla de manera absoluta, el Madrid puede encontrar al compañero adecuado del brasileño en la figura de Tchouameni. Siete campañas, en las que han pasado diversos jugadores, pero que ninguno logró asentarse en el puesto de pivote. Casemiro llegó al Madrid para jugar en el Castilla en primer término en 2013. Debutaría en un encuentro ante el Betis, pero donde lograría su primer flashazo de popularidad fue en el encuentro de vuelta de la Champions en 2014: con 2-0 a favor del Borussia, Ancelotti tiró de él para solventar el trámite clasificatorio. No sólo logró eso, sino que comenzó a ganarse el cariño y el respeto de los aficionados blancos. Tras un año cedido en el Oporto, Casemiro se hizo con un puesto en la plantilla blanca a partir de la temporada 2015-16. Pese a que a Rafa Benítez no acababa de gustarle, fue una derrota en un derbi ante el Atlético de Madrid lo que hizo que Zidane empezase a darle la titularidad en el centro del campo. Desde entonces, es un fijo en el centro del campo blanco.
Pero el problema ha venido después. Ninguno de los jugadores fichados por los madridistas han logrado alcanzar los parámetros que ha mostrado Casemiro. Incluso su compañero Toni Kroos llegó a afirmar que le gustaba jugar ahí pero que no era su puesto natural: "Yo no soy un Casemiro", dijo textualmente en conferencia de prensa con la selección alemana. Primero fue el brasileño Lucas Silva, que llegó en el mercado invernal de 2015. Pero tras una serie de intervenciones, donde dejó más dudas que aciertos, se dejó de contar con él. Puso rumbo al Olympique de Marsella tras nueve partidos como madridista. Ya no volvería a vestir la camiseta blanca.
Posteriormente le siguió el croata Mateo Kovacic, fichado del Inter en el verano de 2015. Petición expresa de Rafa Benítez, jugaría tres campañas de blanco antes de pedir su traspaso rumbo al Chelsea tras el Mundial de Rusia. Kovacic jugó 109 partidos de blanco (entre todas las competiciones) y marcó tres goles. Fue Zidane quien le utilizó más en esa posición: le pedía que ayudase a los centrales a sacar el balón jugado y a construir más el juego desde atrás. Su rendimiento fue bastante bueno: su salida se debió a la cuota de protagonismo que quería tener en los onces titulares.
Luego han pasado hasta tres jugadores subidos de la cantera por ese puesto. En primer lugar fue Fede Valverde. El uruguayo fue firmado en 2015, y tras pasar por el Deportivo de La Coruña (jugó cedido en la campaña 2017-18), no ha sido hasta la campaña 2019-20 cuando dio el salto a la titularidad cuajando buenas actuaciones en el centro del campo. Poco a poco se va ganando la continuidad en el once titular madridista, pero las lesiones le frenan. Habitualmente juega como interior. En la selección celeste juega en el centro del campo en un 4-2-3-1, junto con Bentancur, donde tiene libertad para incorporarse al ataque.
También Marcos Llorente, ahora en las filas del Atlético, jugó en esa posición antes de marcharse al Atlético de Madrid en 2019, aunque también lo hizo en la demarcación de interior. El ahora rojiblanco no se sentía cómodo y prefirió marcharse tras jugar 39 encuentros entre las campañas 2017-18 y 2018-19. Su mejor partido lo hizo en esa posición en la final del Mundial de Clubes de 2018, donde fue elegido mejor jugador de la final del torneo.
El último jugador de la cantera es ser utilizado en ese puesto ha sido Antonio Blanco. El centrocampista supo aprovechar bien sus oportunidades al término de la pasada campaña, pero en la presente temporada, apenas ha contado para Carlo Ancelotti: 36 minutos repartidos en dos encuentros (uno de Liga y otro de Champions). Este ejemplo sirve de resumen de los rivales que ha tenido Casemiro a lo largo de estos siete años. El brasileño no ha encontrado un jugador que le complemente o le ayude a lo largo de estos últimos siete años…
