Las Palmas, ahora o nunca
Tras perder hace dos semanas con el Girona, se quedó a ocho puntos de los playoff. Si ahora le gana a Leganés y Ponferradina se quedará a uno.
Se mascaba la tragedia en el seno de la Unión Deportiva hace dos semanas y un día. Ocurre que el equipo perdió en casa contra el Girona tras una dura tarde de fútbol en la se mezclaron la pérdida de los tres puntos con la propia imagen de un grupo en descomposición, que acabó con dos jugadores expulsado, uno de ellos, Raúl Navas, por agredir a un rival (Terrats). Ese 1-3 ejemplificó a la perfección todos los males de Las Palmas.
Tras esa dura derrota ante el conjunto gerundenses, la UD yacía a ocho puntos de los playoff, más que nunca en toda la temporada, y la sensación de que el curso estaba prácticamente perdido. Le quedaban 11 partidos por delante, y aunque las matemáticas todavía le daban alguna esperanza, la trayectoria del equipo grancanario hacía pensar que la lucha por el ascenso había que empezar a dejarla para el curso que viene.
Además, el fin de semana pasado le tocó visitar al Valladolid, un equipo al alza. Mas cuando se mascaba una nueva tragedia, Las Palmas resurgió para imponerse 0-1 con toda justicia en uno de los escenarios más difíciles de la categoría. Hizo lo que debía y, además, la Ponferradina, que marcaba la frontera de los playoff, le hizo un favor tras dejarse dos puntos contra el Eibar (2-2). La UD recortó un punto, estando ahora a siete de los puestos de privilegio, en cualquier caso una distancia todavía sideral.
Pero de pronto, el tablero de juego para la UD ha cambiado por completo, y en apenas siete días puede arreglar lo que se lleva cargando desde que, precisamente contra el Eibar, saliera de los playoff el pasado mes de diciembre cuando el equipo vasco le ganó 0-1. Desde entonces, en el último partido de 2021, el grupo hoy adoctrinado por García Pimienta vaga como alma en pena por mucho que, por ejemplo, ganara en Tenerife.
Ocurre que, este mismo domingo, la Ponferradina perdió 3-1 en su visita al Mirandés. Así, en caso de que Las Palmas le gane mañana al Leganés, se quedará a tan solo cuatro puntos de los puestos de playoff, con el equipo berciano todavía como sexto clasificado. Levantará la mano y mandará un mensaje. Y ni que fuera un guiño del destino, el equipo de Francisco Javier García Pimienta juega precisamente el próximo domingo en el Toralín, donde se podría enfrentar al partido más decisivo de la temporada, ese que le podría meter de nuevo, con todo, en la lucha por el ascenso a Primera División. En tres semanas podría recortar siete puntos. Casi nada. Ahora sí, para la Unión Deportiva llegó el momento del todo o nada.