Maheta Molango: "No hay previsión de impagos en el Chelsea"
El secretario general de la asociación de futbolistas británicos (PFA) atiende al AS antes de la visita del Madrid a Londres. La crisis blue marca su agenda.
Maheta Molango (1982, Suiza) es el máximo responsable de los jugadores en Gran Bretaña a través del sindicato deportivo con más influencia del mundo. Un puesto en la Professional Footballers' Association (PFA) en el que aterrizó después de una suerte de oposición de entre 95 candidatos de la que salió vencedor. Entre otros motivos, porque nunca dejó de formarse. Ni siquiera durante su carrera como futbolista, que le llevó a España, Inglaterra o Alemania, de donde iba y venía para hacer exámenes de Derecho y Políticas en la Universidad Carlos III de Madrid.
Ese sacrificio le valió para ser nombrado como el abogado deportivo de España en Baker McKenzie, ser asesor legal del Atlético de Madrid y finalmente CEO del Mallorca entre 2016 y 2020, cuando logró dos ascensos consecutivos hasta vencer al Real Madrid. Ahora trabaja en las oficinas de la asociación de futbolistas británicos en Philpot Lane, en el corazón de la City de Londres, donde atiende al Diario AS para comentar los mayores retos de la industria del fútbol -porque también colabora en la FIFA-, sin perder de vista la crisis institucional del Chelsea y la visita del equipo blanco a Stamford Bridge en Liga de Campeones, el próximo 6 de abril.
-¿Cómo describiría la labor que está haciendo en Inglaterra?
El sindicato británico de futbolistas es el más antiguo del mundo. Nació en 1907 y tiene mucha importancia porque mi antecesor logró crear un contrato estándar, un comité de negociación laboral colectiva y la PFA tiene derecho de veto. Por eso el año pasado se intentó imponer un tope salarial para los jugadores y el sindicato lo bloqueó, trataron de cambiar el número de jugadores por plantilla, y como no se siguió el procedimiento correcto, la PFA lo pudo parar. Mi día a día es muy variado porque en Inglaterra hay una regla que dice que ante cualquier procedimiento disciplinario el PFA puede estar representando al jugador.
Por ejemplo, hace dos semanas estuve en una reunión con un club del top 6 de la Premier que quería multar a un jugador y nosotros le representamos. Si la multa supera las dos semanas de sueldo, nosotros la tenemos que aprobar. En la PFA hay una rama de representación legal, otra de formación para entrenadores-por ahí pasó Mikel Arteta-, un departamento de fútbol femenino, otro departamento especial de problemas mentales degenerativos derivados del fútbol y los golpes a la cabeza de los futbolistas... cubrimos tanto a los futbolistas como exfutbolistas, así que representamos a 55.000 personas.
También tenemos un 'pension scheme' para gestionar la jubilación de los futbolistas con un plan de pensiones privado en el que ingresamos 7.000 euros al año por jugador profesional hasta tercera división, sin que ellos contribuyan. Eso se deriva de que tenemos un acuerdo por el que nos dan el 4% de todos los traspasos que se hacen y que van a parar al PFA. Si tuviera que resumir, la PFA es importante por su tradición y su influencia. Tenemos un presupuesto de 30 millones de euros anuales.
"Tuvimos una reunión importante con Infantino y Wenger por el calendario"
-¿Cuáles son los mayores problemas que le está tocando afrontar?
El calendario es una prioridad. Se juegan demasiados partidos y en Inglaterra esta frecuencia está más acentuada. Eso no es un problema para los jugadores, es un problema para el fútbol como industria. No estamos viendo a la mejor versión de los jugadores. De hecho, hace un mes y medio tuvimos una reunión importante con la FIFA en Manchester donde estuvieron todos los capitanes de la Premier y de la Women Superleague, para hablar con Gianni Infantino y Arsene Wenger, por la FIFA, y ver cómo podemos adoptar un calendario con sentido.
-La situación del Chelsea ha terminado por afectar a sus jugadores, ¿se puso en contacto con ellos? ¿ha tenido que hacer gestiones para solventar la situación?
Estamos en contacto con los jugadores en general. No estamos en el día a día de lo que pueda ocurrir dentro del club. Lo vemos desde la perspectiva que pueda afectar a los jugadores y por suerte ahora no ha tenido un impacto contractual sobre ellos y estamos pendientes.
- Precisamente The Telegraph adelantó la semana pasada que algunos agentes de jugadores blue habrían consultado a abogados sobre su situación y las opciones de salir en el caso de que no se les pagara el sueldo, ¿qué posibilidades tienen? ¿cómo cree que afrontarán el partido ante el Real Madrid?
Siendo abogado, no soy una persona que especula. La realidad es que no hay situación de impago y tampoco hay previsión de que eso ocurra. Dentro de la dificultad de la situación, hay cierta tranquilidad. Habrá que ver cómo evolucionan las cosas.
"Lo del Chelsea ahora mismo es un tema quizá emocional más que contractual"
-Usted que ha sido consejero de un club como el Mallorca y asesor legal del Atlético de Madrid, ¿cuánto cree que podría tardar el Chelsea en descongelar sus cuentas?
Lo importante para nosotros es que las obligaciones contractuales se cumplan. Hay un proceso de venta pendiente de resolverse que debería dar una estabilidad al Chelsea a largo plazo. Ahora mismo es un tema quizá emocional más que contractual.
-Las sanciones del gobierno británico han afectado a Alisher Usmanov, que era el patrocinador principal del Everton, Abramovich, expropietario del Chelsea, y ahora Sheikh Mansour, el dueño del City también ha sido reprendido en la Cámara de los Comunes. ¿Qué solución ve a este problema tan arraigado en el fútbol británico con la dudosa procedencia del capital que le financia?
Para empezar hay que plantearse cuál tiene que ser el papel del gobierno en el fútbol. Tenemos que reflexionar si esta es la dirección que quiere tomar el fútbol. Pero ya antes de esta situación había un debate acerca de la propiedad de los clubes. Hubo una comisión parlamentaria que se creó en Inglaterra después de la creación de la Superliga para valorar cuál tenía que ser el futuro de la propiedad de los clubes. El gobierno está valorando crear normas nuevas para el 'directors and owners fit and proper test' para que verifique la fiabilidad de los nuevos inversores. Los futbolistas son los más afectados por esto, y son los primeros afectados.
-La diputada conservadora Tracey Crouch quiere llevar a cabo “47 medidas para salvar el fútbol inglés”, en el que quiere proponer la creación de un derecho a veto de los aficionados, ¿cuál es la posición de la PFA?
Participamos en el proyecto porque nos dieron audiencia tanto por escrito como forma oral. El proyecto de Tracey Crouch genera un debate que era importante. Como todo en la vida, hay que ver las dos partes: lo que funciona y lo que no funciona. Hay un punto intermedio y, siendo extranjero, habiendo crecido futbolísticamente en España, creo que hay cosas que funcionan en Inglaterra. El producto de la Premier está reconocido internacionalmente, la selección inglesa llegó a la final de la Eurocopa... hay cosas en el trabajo de Tracey que son interesantes aunque no hay que olvidarse de que el fútbol funciona. Tuchel comentaba que el modelo alemán es un modelo donde de la afición tiene mucho poder, pero es como todo, el COVID nos ha demostrado que todos jugamos para la afición, aunque lo que no puede faltar nunca son los jugadores... y el balón.
"El fútbol es capaz de regularse a sí mismo, sino será un fracaso para la industria"
-¿El gobierno británico se implica más que el español en el fútbol?¿Es normal?
Estamos a la expectativa para ver qué van a hacer con ese informe, para ver si se implanta. Sigo pensando que el fútbol es capaz de regularse a sí mismo, sino será un fracaso para la industria. Ese informe nos tiene que hacer reflexionar cómo podemos demostrar que somos capaces de hacerlo.
-Hace tres semanas en un foro del Financial Times, Andrea Agnelli, presidente de la Juventus y uno de los impulsores de la Superliga, confirmó que el proyecto sigue adelante, ¿cuál es su perspectiva?
No tengo constancia de si sigue. Es importante no perder de vista lo que ha hecho que nos hayamos enamorado del fútbol. Creemos mucho en la pirámide, en los ascensos y los descensos. Lo he vivido de primera mano cuando era jugador. Creo que mi familia y yo nunca nos olvidaremos de los dos ascensos del Mallorca hasta llegar a Primera. La posibilidad de que el Mallorca esté en Segunda B y aspire a ganar al Madrid dos años después: esa es la magia del fútbol y no se puede perder. Creo que cualquier proyecto que entienda los ingredientes que nos hacen brillar los ojos será bienvenido.
"El Athletic y la Real son buenos ejemplos de dos modelos completamente distintos de sociedad deportiva"
-Ahora que está en entredicho el sistema de sociedades anónimas en el fútbol, ¿cuál es el modelo a seguir?
Todo reside en el equilibrio. Está el ejemplo de los clubes que pertenecen a los socios y que tienen problemas económicos muy graves, y otro ejemplo de Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) que han tenido mucho éxito. Es una cuestión de establecer en qué manos pongo mi club. A veces nos obsesionamos con los modelos, pero el modelo al final son personas, y para qué vienen, qué respeto tienen. El fútbol no es una inversión más, es el producto más cercano a la religión.
El Athletic de Bilbao es un buen ejemplo, es un club sano económicamente, una cantera fabulosa, un estadio fantástico y un sentimiento de pertenencia fantástico. Es de sus socios y siempre me ha parecido fantástico. Y estando en la misma región creo que la Real Sociedad es un club fantástico, que es una SAD, y otro modelo completamente distinto.
"El ejemplo es César Azpilicueta"
-¿Los futbolistas están muy implicados?
El ejemplo es César Azpilicueta. Es un fenómeno, además de ser muy respetado por los compañeros de otros equipos. Se ha ganado un respeto por lo que ha hecho en el campo y por entender la foto más grande. Me parece un perfil buenísimo. Cuando decía que el fútbol tenía que seguir en manos de gente que entiende y le importa el sector, creo que Azpilicueta es un buen ejemplo. También Juan Mata, Paul Pogba o Fernandinho. Tienen mucha implicación, con mucho interés, con comentarios inteligentes cuando nos reunimos con la FIFA. Son gente informada, con un entendimiento de las cosas más allá de sus problemas personales, que es consciente de la plataforma que tiene. Me siento súper orgulloso de escuchar a gente como César Azpilicueta.