Griezmann-João Félix: una pareja perfecta en el Atlético
Francés y portugués dan empaque al ataque del Atleti con talento. Juntos, el ‘7’ y el ‘8’ le aportan al equipo rojiblanco calidad y mucha movilidad.
Cuando en los últimos instantes del último 31 de agosto se confirmó el regreso de Griezmann al Atlético, todas las miradas se dirigieron al mismo lugar: al futbolista que ahora llevaba el ‘7’ que había sido del francés. João Félix. El talento portugués fichado aquel 2019 en el que Griezmann dejó el Atleti por el Barça. Cómo lo encajaría, cómo respondería. Porque João era una estrella aún rutilante. Chispazos, sí, pero sin continuidad, las lesiones, el tobillo, la falta de un clac total con la pizarra del Cholo, ese que Griezmann había logrado en tres meses, la noche aquella del hat-trick en San Mamés (2015). Hasta el partido del viernes pasado, ante el Cádiz, Griezmann y João Félix habían coincidido 232’ en el campo: ante Levante, Real y Liverpool. Ante los red, en esta Champions, con mucha química y calidad, pero su dupla era como el propio João en el Atleti. Sin continuidad. Hasta el miércoles. Hasta el United.
Porque el Cholo, que ha apostado por todas las mezclas posibles, Correa-Suárez, Grizi-Correa, Suárez-Grizi-João, João-Correa..., parece haber encontrado una perfecta: Griezmann-João. Todo talento. Le aportan al Atlético calidad y movimientos sin balón para atacar espacios, complementándose. Movilidad pura que excava caminos para que su equipo progrese. Con ritmo, con fluidez y un nuevo invento del Cholo: el falso ‘8’.
'Grizi', la obra del Cholo
Porque Grizi es el futbolista que mejor ha llevado al campo la pizarra del Cholo. Un Grizi capaz de dividirse, de cambiar el frac por el mono de trabajo a la velocidad de Superman. Ante el United, cuando el Atleti atacaba, era delantero con João; cuando defendía, un volante más para cementar. Su sacrificio en defensa cuando Simeone cambió el sistema fue determinante. Como cuando recibió de tacón una pelota del portugués y, de primeras, envió la pelota al segundo palo donde estaba Lodi para cabecear el 0-1, los cuartos.
Después, en el vestuario, de la foto de celebración de la plantilla no pasó inadvertido un detalle: João llevaba el ‘8’ de Griezmann y Grizi, el ‘7’ que había sido suyo pero ya es de João. Su entendimiento traspasa la pantalla. Comparecía João ante los medios del club cuando Grizi aparecía a su lado y decía: “Que se vaya a la ducha, que se enfría”. A lo matrimoniadas, con su sonrisa. Serio había sido João cuando, hace unos meses, al salir del Cerro, le contestaba a un hincha que le deslizó que lesionara a Grizi para jugar más. “Tienes que tener más respeto por Griezmann”. Respondiendo a todos los cómo. Lo suyo no era agua y aceite con el francés. Mezclan bien, mezclan de verdad. Para alegría del Cholo.