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ATLÉTICO

Llorente y su maldición

El '14' deberá volver el viernes, por las bajas de Wass y de Vrsaljko, a esa posición que le apaga y que no le gusta: el lateral derecho. No hay otra opción.

Marcos Llorente en el Atlético-Celta de Liga.
OSCAR DEL POZOAFP

Marcos Llorente tiene miedo a perderse en uno de esos viajes en los que Saúl se agrisó para siempre. Los viajes desde la banda al lateral, los viajes desde el mediocentro a la defensa. Además de los golazos en las grandes noches, los golazos cuando más se necesitaban, de los que Saúl hacía marca, lo que definía al canterano era su polivalencia, su capacidad de jugar allá donde fuera: en el centro de la defensa, en la banda, en el medio centro, en el lateral zurdo. Sus partidos en el último lugar, y sus entrenamientos, como él mismo reconoció, fueron los que le empujaron a hacer la maleta rumbo a Londres. Esos partidos que caían sobre él como un sino, como una penitencia, su virtud convertida en una cárcel. Meses después, otro futbolista rojiblanco se encuentra entre los mismos barrotes: Llorente.

Porque Marcos Llorente juega donde le pongan, y a su entrenador se lo ha trasladado, pero prefiere jugar donde más vale, donde más suma, algo que también le ha trasladado al Cholo. Y ese lugar no es el lateral derecho sino varios pasos adelante, como interior derecho o extremo. Ese sitio donde el ‘14’ fue decisivo la temporada pasada, la 2020-21, en la que logró sus mejores números en su carrera (13 goles, 12 asistencias). Los mismos números que un año después también hablan, desde su frialdad estadística, meridianos: cero goles, tres asistencias.

Sin Wass ni Vrsaljko

Sexto futbolista en minutos del Cholo esta temporada, quinto de campo (2.136’), su posición siempre baila. Ocho partidos en el mediocentro, ocho como interior derecho, dos como mediocentro ofensivo, nueve donde menos le gusta, donde el fútbol más le condena, más apaga sus virtudes, en el lateral derecho. Es una condena de la que, parece, no puede escapar. Porque a Simeone muchas veces en la temporada no le ha quedado otra. La lesión de Trippier cuando aún estaba en la plantilla, Llorente en la derecha de la zaga. Porque Simeone aunque quiera, ante el Cádiz, no le queda otra. No tiene laterales derechos. Wass, fichado en invierno para ocupar el lugar del inglés, fichado por el Newcastle, se lesionó al primer envite (primer partido como titular, el Camp Nou). Porque Vrsaljko, en un duelo aéreo, se lesionó en el último.